Mariana González, hija del reconocido político Edmundo González, continúa exigiendo una fe de vida de su esposo, Rafael Tudares, al cumplirse 90 días de la detención. La falta de información y respuestas han convertido este caso en un símbolo de la preocupación por los derechos humanos en el país.
El 7 de enero, tres días antes de la toma de posesión en Venezuela, Rafael Tudares fue interceptado por hombres encapuchados mientras llevaba a sus hijos al colegio. Desde entonces, su paradero es desconocido, lo que ha generado una ola de indignación y preocupación.
Exige fe de vida
Durante estos tres meses, Mariana González ha recorrido centros de detención en busca de respuestas, pero se ha topado con el silencio y la indiferencia de las autoridades. «Han ordenado a sus funcionarios no permitirme saber el lugar real y concreto donde se encuentra Rafael», denunció.
González expresó en el comunicado: «Lo tienen oculto y en cautiverio, clandestinamente, en algún lugar desconocido«, denunció en sus redes sociales, exigiendo una fe de vida de su esposo y el cese de la «crueldad» con la que se trata a los familiares de los detenidos.
«Reitero mi solicitud al Estado, de una fe de su vida mediante visita personal que se me permita hacerle en el lugar donde tengan a Rafael, para verificar su integridad y estado de salud», compartió este sábado Mariana González en sus redes sociales.
La directora del Instituto Casla, Tamara Suju, ha alertado sobre las torturas que sufren los presos políticos en centros de detención como Cenapromil, lo que agrava la preocupación por la integridad de Rafael Tudares.