Ante la creciente contracción económica que afecta a los consumidores, un estudio realizado por el equipo de El Impulso revela que el costo de la canasta básica familiar oscila entre 300 y 600 dólares mensuales, dependiendo del número de integrantes del hogar y el ingreso disponible de cada núcleo familiar.
Los ciudadanos consultados manifestaron que la alimentación representa una de las mayores preocupaciones en el presupuesto familiar. Los productos básicos como arroz, harina, azúcar, aceite y caraotas conforman la mayor parte del consumo, mientras que las proteínas animales, principalmente el pollo, siguen siendo la opción más accesible frente al alto costo de la carne roja y el pescado.
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Testimonios de familias afectadas
Aura Bravo, una de las encuestadas, señaló que su familia necesita al menos 600 dólares al mes para cubrir lo esencial: “La canasta básica en nuestra casa incluye verduras, frutas y carnes blancas. El pollo es lo más económico, pero las carnes rojas están bastante costosas”.
Pedro Rangel, padre de familia, explicó que su presupuesto mensual ronda los 350 a 360 dólares “Tratamos de comprar jugos por paquete para las meriendas, pero también varío con jugos naturales. El pollo es la proteína más accesible, porque la carne roja y el pescado son muy caros”, llevándolo a buscar diversas fuentes de ingreso para cubrir los gastos mensuales para una familia de 3 miembros.
Por otra parte, Ángel Camacho, con dos hijos indicó que su gasto mensual en alimentación es de aproximadamente 280 dólares, priorizando productos básicos y evitando el consumo de proteínas costosas, si los precios de productos como el arroz, la harina y el aceite se mantienen estables. No obstante, advirtió que cualquier incremento en estos rubros impacta directamente en su capacidad de compra.
Distribución del gasto y alimentación familiar
El estudio determinó que el mayor porcentaje de consumo en la canasta básica alimentaria lo conforman los granos, las harinas y los vegetales. La proteína animal más común en los hogares es el pollo, mientras que la carne de res y el pescado son considerados productos de lujo debido a sus elevados costos.
Además, muchas familias destinan una parte importante de sus ingresos a las meriendas de sus hijos en edad escolar, asegurando la alimentación de los más pequeños dentro de las limitaciones económicas.
Ante esta realidad, los ciudadanos continúan ajustando su presupuesto y priorizando productos esenciales para hacer frente al aumento de precios, en un contexto donde la estabilidad económica sigue siendo incierta.
