La Embajada de Estados Unidos en Venezuela expresó su respaldo y unión con el pueblo venezolano tras el anuncio de la canonización del beato José Gregorio Hernández, decretada por el papa Francisco este martes 25 de febrero de 2025.
«Nos unimos al pueblo venezolano para celebrar la canonización del Dr. José Gregorio Hernández, cuyo legado de fe, servicio y solidaridad ha dejado una huella imborrable en la sociedad venezolana. Su vida ejemplar continúa inspirando a generaciones dentro y fuera del país», destacó la embajada en un comunicado oficial.
El beato venezolano José Gregorio Hernández será proclamado santo tras la aprobación de los votos favorables de la Sesión Ordinaria de los Padres Cardenales y Obispos miembros del Dicasterio para las Causas de los Santos. El anuncio fue realizado por el Pontífice en un comunicado emitido desde el Hospital Policlínico Gemelli, donde se encuentra internado.
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Asimismo, junto con la canonización de Hernández, el papa Francisco aprobó la proclamación como santo del beato Bartolo Longo, fiel laico italiano nacido en 1841 y fallecido en 1926. Se espera que en los próximos días se convoque un consistorio para definir la fecha de ambas canonizaciones.
El legado de José Gregorio Hernández ha dejado una huella imborrable en Venezuela y en Latinoamérica. La devoción hacia su figura ha crecido en los últimos años, convirtiéndose en un símbolo de fe y esperanza para millones de personas.
¿Quién era José Gregorio Hernández?
José Gregorio Hernández nació en Isnotú, estado Trujillo, el 26 de octubre de 1864. Desde joven, demostró una gran inteligencia y una profunda vocación de servicio. Se graduó de médico en la Universidad Central de Venezuela y se especializó en París, destacándose por su excelencia académica y su compromiso con la comunidad.
A su regreso a Venezuela, ejerció la medicina con entrega, especialmente entre los sectores más vulnerables de la sociedad. Su consultorio se convirtió en un espacio de esperanza para aquellos que no podían pagar por atención médica, brindando no solo tratamiento, sino también apoyo espiritual y consuelo emocional.
Además de su labor médica, José Gregorio Hernández fue un hombre de profunda fe católica, cuya religiosidad marcó su vida y trabajo. Su amor al prójimo y dedicación a los más necesitados lo convirtieron en una figura venerada, iniciándose su Causa de Santidad en 1949, durante el arzobispado de monseñor Lucas Guillermo Castillo.
La canonización de José Gregorio Hernández representa un acontecimiento histórico para Venezuela, al convertirse en el primer santo venezolano proclamado por la Iglesia Católica Universal. Su legado sigue vivo, inspirando a generaciones y reafirmando el valor de la fe y el servicio al prójimo.
