La Casa Blanca confirmó este martes el inicio del primer vuelo desde Estados Unidos hacia la Base Naval de Guantánamo (Cuba) con inmigrantes en situación irregular. La portavoz del gobierno, Karoline Leavitt, aseguró en una entrevista para Fox News que esta medida forma parte de la política migratoria impulsada por el presidente Donald Trump.
“El presidente Trump no se anda con rodeos y ya no va a permitir que Estados Unidos sea un vertedero de criminales ilegales de naciones de todo el mundo”, declaró Leavitt.
La semana pasada, el mandatario estadounidense firmó un memorando para ampliar la capacidad de la base militar de Guantánamo con el propósito de recluir a inmigrantes ilegales que se encuentran en territorio estadounidense y han sido declarados culpables, acusados o condenados por delitos graves.
ICE administrará centro de detención ampliado
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) será el encargado de gestionar las nuevas instalaciones en Guantánamo, donde se han habilitado 30.000 camas adicionales para recibir a los deportados, según informó el exdirector interino de ICE, Tom Homan.
Hasta ahora, la base solo albergaba a migrantes interceptados en el mar antes de llegar a las costas de Estados Unidos, en su mayoría provenientes de Cuba y Haití. Sin embargo, con la reciente firma de la Ley Laken Riley, Guantánamo también recibirá a inmigrantes ilegales vinculados a delitos de agresión, homicidio o ataques contra agentes del orden.
Este nuevo giro en la política migratoria estadounidense ha generado debate y reacciones tanto a nivel nacional como internacional, en medio de un contexto de endurecimiento de las medidas para frenar la inmigración irregular.