El sector azucarero venezolano vive un renacer. Según datos ofrecidos por José Ricardo Álvarez, presidente de la Federación Nacional de Cañicultores de Venezuela (Fesoca), la producción de caña de azúcar está experimentando un crecimiento sin precedentes.
Tras un período de declive, la molienda de caña ha mostrado una recuperación notable. En 2019, se procesaron 2 millones de toneladas de caña, una cifra que se espera superar ampliamente en los próximos años. De hecho, Fesoca proyecta un aumento del 150% para 2025, alcanzando los 5 millones de toneladas, reseña Unión Radio.
Sin embargo, el camino hacia la recuperación total no está exento de desafíos. La inflación, la falta de financiamiento y la competencia internacional son algunos de los obstáculos que deben superar los cañicultores venezolanos.
Por su parte, Celso Fantinel, presidente de Fedeagro, destacó la importancia de garantizar el financiamiento para mantener la producción y recuperar las áreas cultivadas. Asimismo, señaló la necesidad de controlar la inflación y mantener un tipo de cambio competitivo para asegurar la rentabilidad del sector.