El lienzo de la imagen de Nuestra Señora de Altagracia salió de «La Hermita» para dar inicio a la Santa Eucaristía presidida por Monseñor Polito Rodríguez Méndez, Arzobispo de la Arquidiócesis de Barquisimeto.
Luego de la eucaristía se tiene previsto que la sagrada imagen salga en procesión por la avenida Pedro León Torrez hasta la parroquia Nuestra Señora de Altagracia. Dentro de este recorrido los feligreses van rindiendo homenaje a la Santa Madre acompañando de cantos y alabanzas.
Es importante mencionar que esta imagen tiene más de 400 años, y se celebra el tercer viernes de cada enero. Fieles se congregarán para venerar a la patrona que, según la historia, ha sido testigo de innumerables milagros y ha dejado una profunda huella en el corazón de los quiboreños.
La historia de la Virgen de Altagracia en Quíbor está envuelta en un halo de misterio y milagros. Cuenta la leyenda que un devoto quiboreño, tras un largo peregrinaje, encontró el sagrado lienzo sobre una mesa en una posada, cumpliendo así el anhelo de sus hijas. Otro relato narra cómo un agricultor, al borde de la muerte en un río, invocó a una “virgen de la caimana” y fue milagrosamente salvado, otorgándole a la imagen este popular apelativo.
La primera procesión con el lienzo de la Virgen de Altagracia se llevó a cabo en enero de 1882, por iniciativa de monseñor Águedo Felipe Alvarado, quien deseaba engrandecer la reinauguración del templo parroquial. Desde entonces, esta devoción se ha mantenido viva a través de los años, convirtiéndose en una de las celebraciones más importantes de Quíbor.