En una tensa audiencia de confirmación en el Senado, Marco Rubio, senador republicano y nominado por Donald Trump como secretario de Estado de Estados Unidos, propuso este miércoles que el gobierno estadounidense reconsidere las licencias otorgadas a empresas extranjeras, como Chevron, para operar en Venezuela.
El senador argumentó que estas licencias permiten a empresas como Chevron contribuir con miles de millones de dólares al gobierno de Nicolás Maduro, sin que el gobierno venezolano haya cumplido las promesas previas a la concesión de esas autorizaciones.
Rubio señaló que las licencias generales otorgadas a compañías como Chevron son cuestionables, ya que, a su juicio, el gobierno venezolano ha demostrado una total falta de compromiso con las reformas prometidas. «Todo esto debe ser reexplorado», declaró Rubio, sugiriendo que el gobierno de Estados Unidos debería revisar cuidadosamente su política hacia Venezuela, especialmente en lo que respecta a las empresas que siguen operando en el país bajo el amparo de estas licencias.
El senador republicano también aprovechó su intervención para criticar a la Administración saliente de Joe Biden, acusándola de haber sido «engañada» durante las negociaciones con Nicolás Maduro para facilitar la convocatoria de elecciones en Venezuela. Rubio destacó que las elecciones presidenciales celebradas en el país fueron «completamente fraudulentas» y acusó a la administración de Biden de haber caído en un intento de manipulación por parte de la administración de Nicolás Maduro.
Además, Rubio planteó que el chavismo ha utilizado los flujos migratorios hacia Estados Unidos como una estrategia para obtener concesiones, apuntando a la crisis humanitaria que afecta a Venezuela y a la masiva salida de venezolanos del país. Según el senador, entre siete y ocho millones de venezolanos han abandonado Venezuela en los últimos años, y advirtió que se espera que más sigan emigrando.