La alerta la vi en un video https://www.instagram.com/p/DDZmAjIx7DV/ que publicó la periodista Katherine Hernández en su cuenta de Instagram. La denuncia habla de una serie (supuestamente en YouTubeKids) que muestra a un dragoncito de peluche, que, de verlo los niños, podría resultar altamente peligroso, porque induce a las autolesiones, llegando hasta el suicidio, a agresiones y conductas inaceptables.
Vi videos con escenas donde introducía unas navajas en un enchufe, o donde sumergía un secador de pelo -encendido- dentro de una bañera. También en otra donde toma un revólver y dice que va a matar a alguien… nada infantil, por supuesto. Eso encendió mis alarmas. Pensé, como abuela, que me gustaría ser advertida por alguien de lo que está sucediendo.
Investigando, encontré que la denuncia original parece provenir de un video de Tik Tok donde el aparentemente inocente dragoncito enseña a los niños a amarrarse los zapatos y a cepillarse los dientes. Nada malo, ¿verdad?… El caso es que al final del episodio, Doofy se suicida, sí, se suicida, por su incapacidad de lograr atarse los cordones o de lavarse apropiadamente los dientes. De inmediato, muchos padres se hicieron eco de la denuncia y muchos medios la recogieron.
También encontré una lista de canciones que canta Doofy, y todas terminan diciendo “¡me voy a suicidar!”. Es adicto a las drogas y maltrata a su ex esposa. En esa misma dirección de Internet
https://sml.fandom.com/wiki/Doofy_the_Dragon#Evicted_Song_(Bowser_Junior’s_Playtime_2) encontré la historia del dragón:
Doofy el Dragón nació del Sr. y la Sra. Dragón. Durante su infancia, su padre fue bastante abusivo y trató de agredirlo de dos maneras: golpeándolo y, a veces, asfixiándolo (lo que explica su comportamiento horrible y retorcido más adelante).
Durante su edad adulta conoció a su ex esposa. Aunque están casados, nunca se amaron realmente. Si bien no está probado, los comentarios que hace sobre ella podrían mostrar partes de por qué se suicida con frecuencia, como decir que ella lo dejó y que él quiere matarla.
En algún momento tuvo hijos con ella de quienes posiblemente abusó. Después de eso tuvo su propio programa llamado Doofy the Dragon (Serie de TV). Enseña y lava el cerebro a los niños para que cometan una serie de actividades tabú, peligrosas e ilegales, como consumir drogas, cometer delitos, suicidios, asesinatos, malas palabras, acrobacias peligrosas, etc., que a menudo resultan en actos violentos y suicidio”. ¡Absolutamente preocupante!
Yendo un poco más allá en mi investigación, encontré otro video en YouTube de la cuenta de enter.co donde explica que no es un video que esté en YouTube Kids, sino en YouTube, que es una “parodia” de un autor que ya había hecho videos para adultos con personajes infantiles, pero como usaba figuras como Mario Bros -que tienen derechos de autor- fue demandado y obligado a bajarlas. Supuestamente le habían pedido que Doofy no volviera a aparecer y dijo que así sería, pero lo volvió a publicar sños después, cuando apareció con esta nueva “parodia”, supuestamente para el público adulto. Si quieren ver su explicación, entren a este link
https://www.youtube.com/watch?v=o3UkiI8K_dw.
Si todo eso que él dice es cierto, de todas formas hay que encender las alarmas. Porque no todo el mundo que tiene niños se toma la molestia de bajar YouTube Kids, ni de establecer el control parental (aunque deberían hacerlo). Es la primera alerta: si usted tiene niños pequeños, ponga en sus computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes todos los controles que pueda. Porque Doofy, a primera vista, es un muñequito cuchi. Y al verlo así, muchos padres pueden confiarse de que es inofensivo. No esperen a que alguno de sus hijos introduzca una navaja en un enchufe o meta un secador de pelo encendido en su bañera, porque ya sería demasiado tarde.
En este mundo de la comunicación infinita, hay montones de pervertidos que cuelgan videos aparentemente inocentes y terminan causando daños irreparables.
Por mi parte, doy gracias a Katherine Hernández por hacerse eco de la denuncia, porque mientras más se sepa, menos víctimas habrá.
Carolina Jaimes Branger
@cjaimesb