La Cancillería de Argentina denunció la noche del viernes que un funcionario de su representación diplomática en Caracas fue detenido en Venezuela, así como el “hostigamiento, intimidación y violencia psicológica contra los asilados y empleados de la misión argentina”.
“Esta detención no es un hecho aislado, sino parte de una campaña sostenida de hostigamiento”, denuncia el comunicado.
Argentina exige liberación del funcionario
El Gobierno de Javier Milei exigió la liberación inmediata del gendarme Nahuel Agustín Gallo, al tiempo que reiteró la petición de los salvoconductos para los opositores asilados, colaboradores de la líder María Corina Machado.
Las autoridades argentinas detallaron que el 8 de diciembre, el Cabo Primero Nahuel Agustín Gallo ingresó al territorio de Venezuela desde Colombia, a través de un paso fronterizo terrestre, y cruzó el Puente Internacional Francisco de Paula Santander, para dirigirse al estado Táchira, con el único propósito de visitar a su familia y a su pareja, con quien comparte un hijo en común.
Pese a la naturaleza estrictamente personal de su visita, Gallo “fue detenido de manera inmediata, sin motivo legítimo alguno y en abierta violación de sus derechos fundamentales”, señaló el Gobierno argentino.
Embajada de Argentina bajo vigilancia
El comunicado denuncia que la residencia diplomática se encuentra asediada por francotiradores y la ocupación ilegal de las viviendas vecinas, lo que configura “un cerco de facto con el claro objetivo de ejercer presión y generar un clima de terror sobre quienes se encuentran en el interior de la representación diplomática”, indica.
“Argentina no tolerará actos de esta naturaleza contra sus ciudadanos y deplora este tipo de prácticas que contravienen los principios esenciales del respeto a la libertad individual y la dignidad humana”, advirtió en el comunicado.
En este sentido, solicita al Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, actuar con la urgencia y la determinación que la situación demanda, en referencia al empleado local y la entrega de los salvoconductos para miembros de la misión diplomática y los opositores asilados en la residencia desde el mes de marzo.
“La pasividad o la demora en la acción solo contribuirán a agravar la situación”, enfatiza la misiva.