La ONG Fundaredes ha denunciado la grave situación de la educación intercultural bilingüe en las comunidades indígenas de Venezuela. En un reciente informe, difundido este martes 26 de noviembre, la organización alerta sobre el deterioro de las escuelas, la falta de recursos y la discriminación, lo que está provocando una pérdida de identidad cultural y marginación de los pueblos originarios.
Según Fundaredes, el Estado venezolano ha fallado en garantizar el derecho de las comunidades indígenas a una educación de calidad, culturalmente relevante y accesible. La falta de inversión en infraestructura educativa, la escasez de docentes capacitados y la discriminación sistemática han llevado a una crisis educativa que afecta a miles de niños y jóvenes en todo el país.
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“Las comunidades indígenas enfrentan una crisis educativa que perpetúa la desigualdad, vulnera derechos fundamentales y pone en riesgo la preservación de sus culturas”, señala el informe. La organización destaca casos concretos como el de Delta Amacuro, donde el 80% de las escuelas no operan en condiciones adecuadas, y el de Amazonas, donde cientos de niños deben cruzar el río Orinoco para recibir educación en Colombia.
Con base en el informe de Fundaredes, se tiene que estos grupos étnicos representan el 2,8% de la población total de Venezuela, localizados principalmente entre los estados Amazonas, Bolívar, Delta Amacuro y Zulia.
La educación indígena es un pilar fundamental para la permanencia de las culturas originarias. Al transmitir lenguas, costumbres y saberes ancestrales, se asegura la continuidad de un legado invaluable. Este proceso educativo no solo fortalece la identidad cultural, sino que también fomenta la inclusión y el respeto a la diversidad, contribuyendo a construir sociedades más justas y equitativas.
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Difíciles condiciones escolares
A esto se suma la escasez de docentes capacitados en educación intercultural y bilingüe, lo que restringe aún más la capacidad para cumplir con la garantía constitucional que obliga al Estado a proveer el traspaso de conocimientos ancestrales en estas poblaciones.
La pérdida de la lengua materna y la cultura es otra de las consecuencias de esta crisis educativa. Al no contar con una educación que valore y promueva sus tradiciones, los jóvenes indígenas están perdiendo su identidad y enfrentando dificultades para integrarse en la sociedad.
La educación impartida a pueblos indígenas en Venezuela ha sido, desde la época colonial, seriamente descuidada, pues no representaban un sector importante de la población para los gobernantes españoles. Al obtener la independencia de Venezuela, la nueva administración tampoco tomó en cuenta la educación de los aborígenes, dejando como consecuencia altas tasas de analfabetismo y capacidades limitadas para su avance social y económico.
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Medidas del Estado venezolano
De acuerdo con el informe de Fundaredes, en los últimos años la educación de los pueblos indígenas no ha avanzado mucho, sino al contrario, ha venido en declive, como el sistema educativo del resto del país. Los esfuerzos del Estado para promover la educación bilingüe y la diversidad cultural son inoperantes. Con el poco apoyo humano y de recursos adecuados, el futuro de la educación autóctona en Venezuela parece desvanecerse.
Fundaredes también hizo un llamado al gobierno a priorizar la inversión en infraestructura y en la capacitación de docentes en enfoques interculturales y bilingües, así como a «garantizar el acceso equitativo a una educación de calidad, que respete y valore la diversidad cultural de los pueblos indígenas»
Reconocer y valorar la educación indígena es indispensable para empoderar a las comunidades originarias y garantizar su desarrollo integral.
