El esperado encuentro entre Caracas FC y Deportivo Táchira, uno de los clásicos más importantes del fútbol venezolano, fue suspendido este martes en el minuto 81 debido a un violento incidente protagonizado por un grupo de hinchas del equipo local. El partido, que se jugaba en el Estadio Olímpico de la UCV, se encontraba 0-4 a favor de Deportivo Táchira cuando un grupo de seguidores del Caracas FC irrumpió en el recinto para agredir e insultar a los jugadores, provocando la interrupción del encuentro.
Según los videos que circulan en redes sociales, los hinchas, sin ser detenidos por la seguridad del estadio, ingresaron al campo y se acercaron a los futbolistas de Caracas para empujarlos y proferirles insultos por el marcador adverso. La situación de tensión obligó al árbitro principal a suspender el partido de manera indefinida, mientras los jugadores intentaban resguardarse en sus vestuarios. Sin embargo, los agresores persiguieron a los futbolistas, creando un ambiente de caos.
Pese a la presencia de algunos agentes de la policía en el estadio, los hinchas lograron destruir el sistema de VAR del recinto, lo que aumentó la gravedad del incidente. La falta de medidas de seguridad adecuadas en el estadio fue uno de los principales puntos criticados, tanto por las autoridades como por dirigentes del fútbol venezolano.
Reacciones y condenas
Tanto la Federación Venezolana de Fútbol como la Liga FUTVE emitieron un comunicado conjunto en el que rechazaron enérgicamente la violencia y los actos de intimidación hacia los jugadores. En el texto, se calificó de «reprobable» el comportamiento de los aficionados y se advirtió que no se tolerarán tales actitudes. Además, ambas entidades anunciaron que se iniciará una investigación para determinar las responsabilidades de este suceso y evitar que se repitan incidentes similares en el futuro.
Por su parte, Jorge Silva, presidente del Deportivo Táchira, también expresó su indignación por el hecho. En entrevista con medios deportivos, Silva criticó la “seguridad completamente mediocre e irresponsable” en el estadio y lamentó que no se tomaran las medidas de protección adecuadas en un clásico, señalando que cualquier evento deportivo de esta magnitud requiere una vigilancia estricta.