El Parque Nacional Terepaima, un tesoro natural de Venezuela, está a punto de expandir sus límites. Esta iniciativa, que busca proteger al amenazado oso frontino, también beneficiará a otras especies emblemáticas como el jaguar, los monos araguatos, el cunaguaro, la guacharaca y la paraulata llanera
En una reciente rueda de prensa, el alcalde del municipio Iribarren, Luis Jonás Reyes, junto a Guardaparques Universitarios, dieron a conocer un ambicioso proyecto de expansión del Parque Nacional Terepaima. Esta iniciativa, que busca ampliar la zona protegida en 14.753 hectáreas, tiene como objetivo principal fortalecer la conservación del oso frontino, una especie en grave peligro de extinción.
Las parroquias Buena Vista y Juárez serán las principales beneficiadas por esta ampliación, ya que abarcan aproximadamente el 90% del territorio propuesto. En esta edición del Click Dominical, te invitamos a conocer algunas de las especies emblemáticas que comparten su hábitat con el oso frontino en este importante ecosistema.
El jaguar
Este majestuoso animal, considerado un símbolo de la selva, desempeña un papel fundamental en el equilibrio de los ecosistemas. Sin embargo, debido a la pérdida de su hábitat, la caza furtiva y otras amenazas, las poblaciones de jaguar se encuentran en declive a nivel mundial. En el Parque Terepaima, este felino enfrenta desafíos similares, lo que hace que su conservación sea una prioridad.
Los monos araguatos
Son una de las joyas de la fauna del Parque Nacional Terepaima. Estos primates, conocidos por sus llamativos colores y sus profundos rugidos, habitan en los bosques húmedos del parque. Su presencia es un indicador de la salud del ecosistema, ya que son especies sensibles a la deforestación y la fragmentación de su hábitat. Desafortunadamente, los araguatos enfrentan amenazas como la caza furtiva y la pérdida de su hábitat.
El Cunaguaro
El Parque Nacional Terepaima alberga una rica diversidad de fauna, entre la que destaca el majestuoso cunaguaro (Leopardus pardalis). Este felino, de pelaje moteado y tamaño mediano, es un depredador ágil y adaptable que desempeña un papel crucial en el equilibrio del ecosistema. En las selvas y bosques del parque, el cunaguaro encuentra un hábitat ideal para cazar sus presas, que incluyen desde pequeños roedores hasta mamíferos de mayor tamaño.
La Guacharaca
Esta ave, conocida por su característico canto que resuena en los bosques húmedos del parque, es un verdadero tesoro natural. Su plumaje, que combina tonos marrones y negros, la camufla perfectamente entre la vegetación, permitiéndole pasar desapercibida a los ojos más atentos.
La Paraulata Llanera
Su melodioso canto resuena entre la exuberante vegetación del parque, deleitando a quienes tienen la fortuna de escucharla. Con su plumaje gris y blanco, y su larga cola, se camufla perfectamente en el entorno, convirtiéndose en una verdadera maestra del mimetismo. Esta especie, endémica de los llanos venezolanos, ha encontrado en el parque Terepaima un refugio ideal para anidar y alimentarse.