Venezuela experimenta una transformación acelerada de sus paisajes naturales, según revela el último análisis de MapBiomas Venezuela. La iniciativa, que monitorea la cobertura y el uso del suelo a través de imágenes satelitales, ha constatado una pérdida de cerca de 41.600 km² de vegetación natural desde 1985.
De acuerdo una nota publicada por Banca y Negocio, el norte de Venezuela, donde se concentra la mayor parte de la población y la actividad económica, es el más afectado. La expansión de la agricultura ha transformado profundamente los ecosistemas, con un incremento del 8% en la superficie alterada en las últimas cuatro décadas. Al sur del Orinoco, aunque la deforestación es menor, también se observan cambios significativos, especialmente en las zonas cercanas a los centros mineros.
La directora de Investigación de Provita e integrante de MapBiomas Venezuela, Irene Zager, alertó sobre la creciente presión sobre los ecosistemas venezolanos.
«Estos hallazgos subrayan la urgencia de implementar políticas de planificación territorial que promuevan la conservación de los recursos naturales y mitiguen los impactos de las actividades humanas», citan en el portal web.
Otro aspecto preocupante es el crecimiento de las áreas urbanas y mineras. En la publicación señalan que las ciudades venezolanas han experimentado un expansión superior al 60% en los últimos 39 años, mientras que la minería, aunque ocupa una superficie relativamente pequeña, ha aumentado casi nueve veces desde 1985.
Por su parte,Rodrigo Lazo, líder técnico de MapBiomas Venezuela, destacó el potencial de estos datos para fortalecer la gestión territorial y promover un desarrollo sostenible.
«Los resultados de MapBiomas Venezuela nos brindan una oportunidad única para implementar políticas públicas más efectivas y equilibrar las necesidades de la sociedad con la conservación de la naturaleza», aseguró.
MapBiomas Venezuela ofrece una herramienta invaluable para comprender los cambios en el territorio venezolano. Al proporcionar datos abiertos y gratuitos, esta iniciativa permite a investigadores, tomadores de decisiones y ciudadanos en general acceder a información actualizada y precisa sobre el estado de los ecosistemas.