Insistiendo en mi llamado a reflexión sobre los delitos ambientales que vienen ocurriendo durante décadas en las zonas que han preservado la vida en esta “Tierra de Gracia” y, más aun, aumenta mi preocupación lo que ocurre en nuestros jardines y patio trasero, si así se pueden denominar las zonas que son ejemplo demostrativo de esta nefasta verdad, por ejemplo, de lo que podemos llamar nuestro jardín, está el “Bosque Macuto,” que fue protección ambiental de Barquisimeto y Cabudare, la montaña “Terepaima”, Alfa y Omega de la Cordillera de los Andes y por nuestro patrio trasero podemos citar la “Sierra de Portuguesa,” donde tienen sus nacientes importantísimos ríos, que riegan al granero de Venezuela, el estado Portuguesa (Acotando que el área geográfica de esta Sierra, pertenece más al estado Lara que al estado Portuguesa) y son afluentes del río Orinoco, a través de la Apuroquía, la “Cuenca del Rio Tocuyo” que algunos han llamado el Nilo de nuestro país, que proporciona agua dulce al 85% de la población larense y riega el norte de Yaracuy y tiene su desembocadura en el estado Falcón, en la Cuenca del Mar Caribe, y, por qué no, el “Parque Nacional Cerro Saroche,” que está ubicado en los municipios Torres, Jiménez e Iribarren del Estado Lara; zona semiárida que también está siendo arrasada por la tala y la quema indiscriminada e impune.
Ante las denuncias de lo que está ocurriendo como resultado de la tala y la quema indiscriminada, en lo que “era” un bosque nublado, la montaña aledaña al caserío “Santa Marta,” de la parroquia Hilario Luna Luna, Municipio Morán de este estado Lara, voy a utilizar las enseñanzas de mi gran y extrañado amigo, el científico “Radamés Urtiaga,” tomadas de su obra: “Calentamiento y Deterioro Ambiental –Fin de la Sociedad del despilfarro,” porque el tema ya me parece repetitivo y a veces, sin objetivo cierto; son más de treinta años queriendo ser útil intentando despertar la conciencia ambiental sin tener resultados efectivos ante la indiferencia ciudadana y de los funcionarios que aceptaron la autoridad suficiente para cumplir con la responsabilidad de preservar el ambiente sobre la problemática que atenta contra “TODOS LOS SERES VIVOS,” sin olvidar las personas que decían llamarse “ambientalistas” y sólo utilizaron esta irrecuperable situación, para lograr posiciones políticas, comprobándose la certeza de las palabras del Libertador Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte y Blanco cuando expresó:
“EL TALENTO SIN PROBIDAD ES UN AZOTE.”
Del doctor Radamés Urtiaga Cito:
El clima de la tierra ha pasado a través de muchos períodos de calentamiento y enfriamiento durante su historia. De manera que actualmente los problemas de cambio climático no son nuevos en la tierra. Sin embargo, los cambios climáticos en él se debieron a condiciones impuestas por la Madre Naturaleza y esos cambios parecen que fueron cíclicos entre calientes y fríos.
Actualmente los cambios nos preocupan debido a que son causados por la actividad del hombre.
Estos cambios en el medio ambiente causados por el hombre pueden tener tal influencia en la tierra que el ciclo puede paralizarse. Podemos experimentar la tendencia a un calentamiento que haga el clima de nuestro planeta como el de Venus ( 430 0C ), donde la atmósfera está compuesta casi en su totalidad por anhídrido carbónico, o una tendencia hacia el enfriamiento que provoque un clima como el marciano (menos 49 grados centígrados) Uno de los factores que causan estas temperaturas inhabitables en Venus y Marte son los gases de su atmósfera. Estos gases influencian la tasa de calor, que determina su clima global.
Hace aproximadamente 100 millones de años, comenzó un largo deslizamiento de un clima cálido a uno frío. Para esa época, los niveles de anhídrido carbónico eran mucho más altos que los actuales debido a una gran actividad volcánica. Esta actividad volcánica que estuvo asociada a la extensión de los océanos, comenzó a disminuir y, a medida que los niveles de anhídrido carbónico en la atmósfera comenzaron a disminuir, el clima de la Tierra se enfrió gradualmente. El surgimiento de los continentes y las sierras, causada por el choque de las placas de la tierra, estimularon la formación de los glaciares. A medida que el clima global se enfriaba más, la tierra experimentó las edades de hielo.
Maximiliano Pérez Apóstol
