La crisis sanitaria en Venezuela continúa agudizándose, con la situación de los laboratorios clínicos como uno de los problemas más acuciantes. Según Judith León, presidenta de la Federación de Colegios de Bioanalistas de Venezuela, al menos el 70% de estos centros a nivel nacional no cuentan con las condiciones necesarias para prestar un servicio adecuado.
León denunció la precaria situación laboral de los bioanalistas, con salarios insuficientes que no les permiten cubrir las necesidades básicas y garantizar una calidad de vida digna. «El salario promedio de un bioanalista debería ser de $570 dólares«, afirmó la especialista, quien destacó la importancia de aumentar los salarios en los centros de salud pública para atraer y retener talento.
La baja calidad de vida de los trabajadores del sector salud se refleja en la disminución de la calidad de los servicios ofrecidos. Los laboratorios, con equipos obsoletos y falta de insumos, no pueden garantizar resultados confiables y oportunos. Esta situación obliga a los pacientes a buscar alternativas en el sector privado, donde los costos de los exámenes son prohibitivos para la mayoría de la población.
«Realmente en los hospitales los exámenes de laboratorio no los realizan. Siempre te van a mandar a que te los realices por fuera y luego regresas con los resultados», aseguró Liliana Hernández, una ciudadana afectada por esta situación. Los costos de los exámenes básicos pueden variar entre 6 y 20 dólares, mientras que los exámenes especializados pueden superar los 70 dólares, cifras que resultan inaccesibles para muchos venezolanos.
María Cabrera, presidenta del colegio de bioanalistas del Distrito Capital y el estado Miranda, coincidió en que los servicios de bioanálisis en los centros públicos se encuentran «inoperativos» en un 80%. Esta situación pone en riesgo la salud de millones de venezolanos, quienes no pueden acceder a diagnósticos oportunos y precisos.
