La principal amenaza para las tierras boscosas septentrionales, especialmente las boreales, es la tala. Por supuesto, esta no libera automáticamente C02 en la atmosfera. Si se planta un árbol cada vez que se tala otro, no hay cambios importantes ni siquiera a largo plazo. Pero si no se les reemplaza, entonces hay una liberación neta de C02.
Las sierras cubren aproximadamente el 20 por ciento de la superficie de la Tierra. En las Montanas o Sierras vive aproximadamente el 10 por ciento de la población del planeta, pero la mitad de la humanidad depende más o menos directamente de los recursos que ofrecen, como el agua, energía, minerales, bosques, o los lugares de esparcimiento. Con su variada topografía, inclinaciones de las laderas, y aislamiento ecológico, las sierras sostienen ecosistemas más diversos y un gran porcentaje de especies endémicas que las que sostienen las regiones más bajas.
“En distintas partes del Planeta, las zonas montañosas están sufriendo en grados diversos la influencia de las actividades humanas.”
En el pasado, los leñadores del norte se concentraban en las zonas boscosas más accesibles y templadas. Pero estás están agotadas: Canadá y Alaska quieren ahora la tala de sus bosques más septentrionales. Una amenaza aún mayor pende sobre los bosques de la ex Unión Soviética, donde la madera es una de las pocas fuentes de divisas extranjeras y los cambios políticos han impedido a las autoridades centrales poder aplicar sus planes de reforestación. Las compañías madereras extranjeras en Siberia han aumentado considerablemente en los últimos años y no hay señales de que este aumento se detenga. En el pasado los madereros de las franjas meridionales de los bosques boreales dependieron de la regeneración natural de los árboles, pero en el extremo norte este fenómeno ha sido más lento.
En algunos lugares, la reposición natural puede incluso no efectuarse. Los árboles colocados sobre el hielo permanente que se encuentran bajo buena parte de la taiga rusa (los bosques húmedos y sub-árticos de coníferas) podrían no volver a crecer jamás si la tala disuelve el suelo y lo inunda. La reforestación deliberada de los bosques boreales es motivo de intensas investigaciones, particularmente en Finlandia, pero los especialistas dicen que todavía no conocen como a plantar con éxito los bosques boreales que han sido cortados.
Fuente: Calentamiento y Deterioro Ambiental- Fin de la Sociedad del Despilfarro. Radamés Urtiaga.
Según Moferma Press, en pleno estrago de “Helene”, se mueve por el Golfo de México el huracán “Milton” alcanzando categoría 5 camino hacia Florida, donde solicitan la evacuación masiva.
Aunque los modelos meteorológicos varían, la trayectoria más probable indica que Milton podría tocar tierra este miércoles en la zona de Tampa Bay y permanecería como huracán a medida que avanza a través de la parte central de Florida hacia el océano Atlántico, indican los meteorólogos. Esta ruta no pasaría por los estados del sureste del país que quedaron devastados por el paso de Helene, el cual causó daños catastróficos desde Florida hasta los montes Apalaches y dejó más de 230 muertos.
Milton alcanzó la categoría de huracán, esta es la primera vez que el Atlántico tiene tres huracanes simultáneos después de septiembre, según el experto en huracanes de la Universidad Estatal de Colorado Phil Klotzbach.
El huracán Milton se intensificó rápidamente este lunes y alcanzó la categoría 5, la más alta de la escala Saffir-Simpson, mientras avanza en las aguas del Golfo de México.
En su último reporte, el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (NHC, por sus siglas en inglés) informó que el huracán presentaba vientos máximos sostenidos de 285 km/h y con rachas superiores.
El ciclón se ha intensificado de manera «explosiva» en las últimas 24 horas, pues en la tarde del domingo recién había alcanzado la categoría 1.
Ahora bien, en mis más de treinta años de alertas pronunciadas he manifestado mi preocupación por lo que viene ocurriendo en las montañas de Venezuela, y más aún en nuestro patrio trasero y en el jardín de nuestros hogares, la “Sierra de Portuguesa y la Cuenca del Rio Tocuyo.” Estos últimos días he alertado sobre la devastación que viene ocurriendo en la montaña aledaña al caserío Santa Marta, parroquia Hilario Luna Luna, Municipio Morán de este estado Lara, no pareciendo ser coincidencia que, con la intensa lluvia caída sobre Barquisimeto, cayó granizo por vez primera sobre nuestra ciudad capital.
¿A quién (es) corresponde parar y penalizar los ecocidios que atentan contra la vida?
Maximiliano Pérez Apóstol