El comercio venezolano se enfrenta a una grave situación debido a los retrasos en las importaciones, que en algunos casos alcanzan los cuatro meses, según alertó Rusvel Gutiérrez, presidente de la Cámara de Comerciantes Industriales y Aduaneros del estado La Guaira.
En una entrevista concedida a Onda La Superestación, Gutiérrez explicó que esta problemática se debe a una combinación de factores, entre los que se incluyen la complejidad de los trámites administrativos, las dificultades logísticas y la disminución de los envíos desde China.
«Antes, un pedido desde China llegaba en 45 días, ahora debemos calcular un plazo de 3 o 4 meses«, indicó Gutiérrez. Esta situación ha obligado a los importadores a planificar sus compras con mucha antelación, lo que genera incertidumbre y afecta la disponibilidad de productos en el mercado.
El puerto de La Guaira, uno de los principales puntos de entrada de mercancías al país, también se ha visto afectado por esta crisis. Gutiérrez señaló que la actividad portuaria ha disminuido considerablemente, lo que ha generado retrasos adicionales en la entrega de los productos.
«La falta de actividad portuaria ha llevado a que mercancías que deberían llegar para fin de año, en ocasiones, se reciban hasta en carnaval», afirmó.
Esta situación ha generado preocupación en el sector comercial, ya que los retrasos en las importaciones pueden afectar la disponibilidad de productos, generar escasez y aumentar los precios. Además, esta situación podría tener un impacto negativo en la economía del país.
Ante esta problemática, la Cámara de Comerciantes Industriales y Aduaneros del estado La Guaira ha hecho un llamado a las autoridades competentes para que tomen medidas que agilicen los trámites aduaneros y mejoren la eficiencia de los puertos, a fin de garantizar un flujo más fluido de las importaciones y evitar mayores inconvenientes en el futuro.