Trabajo de www.radiofeyalegrianoticias.com
El economista Aldo Contreras afirmó este martes que el “arbitraje cambiario” —que se sitúa entre seis y siete bolívares por dólar entre la tasa oficial y la del mercado paralelo, que resurgió tras casi nueve meses de estabilidad— no es consecuencia de la “viveza criolla”, como algunos sugieren, sino una respuesta racional de los empresarios ante las actuales condiciones económicas del país.
Durante su participación en el programa De Primera Mano de Radio Fe y Alegría Noticias, Contreras explicó que el Banco Central de Venezuela (BCV) redujo la oferta de divisas en las mesas de cambio de 100 millones de dólares a solo 30 o 35 millones de dólares semanales.
Esto, según él, obligó a los empresarios a buscar estrategias para ajustarse a la realidad del mercado, como por ejemplo, recibir el dólar a una tasa intermedia, hacer descuentos para quienes paguen en divisas o negociar con el proveedor o cliente la forma de pago, lo cual ha generado molestias por parte de este último.
“Quienes reciben a BCV, pero importan y no consiguen los dólares oficiales en el banco, o los consiguen con una recarga del 3,80 %, que es la comisión por retirar divisas de las mesas de cambio, compran a un dólar más caro que el dólar BCV y si no los consiguen en este mercado oficial, deben acudir al mercado paralelo, lo que lleva a los importadores a buscar estrategias para protegerse”, precisó.
¿Qué debe hacer el BCV?
El economista aseguró que el Banco Central de Venezuela debería actuar de inmediato, llevando el tipo de cambio oficial a, al menos, 40 bolívares por dólar, con el fin de reducir la sobrevaluación del bolívar y “dejar de quemar” más de 5.000 millones de dólares por mantener la tasa en alrededor de 36,5 bolívares.
Asimismo, dijo que el BCV tiene que retomar las políticas monetarias y cambiarias para recuperar la confianza en la tasa oficial, lo que permitiría un nuevo flujo de divisas y una mejor combinación de estas con el uso de bolívares.
Actualmente, en sectores como el farmacéutico y el de alimentos, el uso del bolívar representa más del 80 %, mientras que en el sector de electrodomésticos ha alcanzado un 50 %, de acuerdo con Contreras.
Hacia una tasa de cambio única
Para lograr una única tasa de cambio, Contreras considera necesario crear confianza, fomentar el libre mercado y garantizar la seguridad jurídica, ya que los ciudadanos esperan un bienestar político y confianza en las instituciones y poderes del Estado.
Destacó que Venezuela aún no ha logrado establecer una economía libre de mercado, con bajos impuestos y un enfoque exportador no petrolero.
Para ello, subrayó que hace falta implementar un plan de libertad económica que incluya estabilidad cambiaria y políticas económicas internacionales, así como reactivar el sector construcción y abrir el acceso al crédito.
En el corto plazo, Contreras propuso eliminar el Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) del 3 % sobre los pagos en divisas, así como la comisión del 3,8 % que el BCV cobra a la banca por retirar divisas, lo que ayudaría a frenar la sobrevaluación del bolívar y el arbitraje cambiario.
Previsiones para el cierre de año
En cuanto a las previsiones para el último trimestre del año, Contreras expresó que los meses poselectorales dejaron un sinsabor en los comerciantes. Aunado a ello, el aumento del flujo migratorio de venezolanos, junto a las dificultades cambiarias, la falta de crédito y la inestabilidad política, sugiere un trimestre con bajo consumo y una economía para analizar con lupa.
Recomendó ser cautelosos con cada dólar y bolívar. Igualmente, tomar de forma inteligente las decisiones sobre qué, cómo y cuánto producir.
Radio Fe y Alegría Noticias también conversó sobre este tema con la economista Tamara Herrera, quien aseguró que el arbitraje cambiario genera un aumento en los costos de la cadena de producción de los diferentes sectores y, por ende, inflación que afectará el poder adquisitivo de los ciudadanos.
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