El ministro de Defensa de Israel afirmó que se está acabando el tiempo para alcanzar un acuerdo de alto el fuego temporal con el grupo insurgente Hamás que, según dijo, podría llevar también la calma a la volátil frontera norte del país con Líbano.
En declaraciones a reporteros, Yoav Gallant dijo que se dan las condiciones para una pausa de al menos seis semanas en los combates, que incluiría la liberación de muchos de los rehenes que siguen retenidos en Gaza. Pero no se pronunció acerca del final permanente de la guerra, algo que exige Hamás, lo que plantea dudas sobre la viabilidad del pacto.
«Israel debe llegar a un acuerdo que permita una pausa de seis semanas y la devolución de los rehenes», dijo. Tras ese periodo, “mantenemos el derecho a operar y alcanzar nuestros objetivos, incluyendo la destrucción de Hamás”.
Estados Unidos, Egipto y Qatar llevan meses trabajando para mediar en un alto el fuego que ponga fin a la devastadora guerra entre Israel y Hamás, que comenzó el 7 de octubre tras un letal ataque insurgente palestino sobre el sur de Israel. Uno de los principales puntos de fricción ha sido la exigencia de Hamás para poner fin a la guerra, así como la retirada total de las tropas israelíes de la Franja de Gaza.
En las últimas semanas, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha planteado un nuevo escollo: que su país controle de forma indefinida un corredor estratégico en la frontera entre Gaza y Egipto.
Gallant fue citado por la prensa israelí diciendo que el país podría retirarse de esa zona durante seis semanas para permitir la puesta en libertad de los rehenes sin poner en peligro la seguridad de Israel. Al parecer, los dos políticos se enzarzaron en una discusión a voces durante una reciente reunión del gobierno en la que los ministros habían respaldado mayoritariamente a Netanyahu.
Durante el encuentro del lunes con periodistas extranjeros, Gallant fue preguntado por su relación con el primer ministro.
“Como ministro de Defensa, mi primera prioridad es el Estado de Israel y aquellos que lo protegen, y después está todo lo demás”, dijo.
La actual propuesta de alto el fuego, patrocinada por Estados Unidos, contempla un plan en tres fases que comenzaría con una pausa de los combates durante seis semanas, durante las que Hamás liberaría a algunos de los 70 rehenes que se cree que siguen vivos en el enclave palestino.
A cambio, Israel dejaría libres a docenas de reos palestinos, retiraría sus tropas de los centros de población palestinos, permitiría el regreso de los desplazados a sus lugares de residencia habituales y facilitaría la entrada de enormes cantidades de ayuda humanitaria vital.