Brasil atraviesa su peor sequía desde que iniciaron las mediciones a escala nacional hace más de 70 años, con 59% del país bajo estrés —un área que equivale a cerca de la mitad del territorio de Estados Unidos.
Importantes cuencas fluviales de Amazonia registran mínimos históricos, y varios incendios forestales descontrolados, provocados por mano humana, han arrasado áreas protegidas y han propagado el humo en amplias áreas, haciendo que la calidad del aire descienda drásticamente.
«Es la primera vez que una sequía abarca desde el norte hasta el sureste del país», dijo Ana Paula Cunha, investigadora del Centro Nacional de Monitoreo y Alertas de Desastres Naturales en un comunicado publicado el jueves. «Es la sequía más intensa y generalizada de la historia».
La tarde del lunes, el humo hizo que en Sao Paulo, un área metropolitana de 21 millones de personas, se respirara el segundo aire más contaminado del mundo, después de Lahore, Pakistán, según datos recopilados por IQAir, una empresa suiza de tecnología del aire.
Unos 1.100 kilómetros (683 millas) hacia el norte, un incendio forestal atraviesa el Parque Nacional de Chapada dos Veadeiros, uno de los sitios turísticos más famosos de Brasil.
«Este año, la temporada de estiaje comenzó mucho antes que en años anteriores, mientras que la temporada de lluvias fue intensa pero breve», dijo a The Associated Press Nayara Stacheski, directora del parque. «Hay fuertes vientos, la humedad del aire es muy baja y hace un calor extremo. Todo esto agrava el incendio».
El lunes, había un incendio forestal descontrolado en un área remota. Se esperaba la llegada de un helicóptero para transportar a elementos del cuerpo de bomberos. Otro incendio fue controlado por 80 bomberos, con apoyo de dos aeronaves. Los otros incendios amenazaban con entrar al parque.
Los incendios en una de las pocas áreas protegidas de Cerrado, la sabana brasileña, son apenas el más reciente drama del país, acuciado por meses de incendios. Desde el inicio del año hasta el 8 de septiembre, en Brasil se registraron casi 160.000 incendios, en el peor año desde 2010. En Pantanal, el área pantanosa más grande del mundo, ha sido el segundo peor año de incendios del que se tiene registro.
La mayoría de los incendios son provocados por los seres humanos como parte del proceso de deforestación o para liberar pastizales y tierra agrícola. En lo que va del año, en Brasil se ha quemado un área del tamaño de Italia.
El fuego no es el único problema. Más de 1.900 kilómetros (1,200 millas) al noreste de Chapada dos Veadeiros, el Amazonas —el río más voluminoso del mundo— y uno de sus principales afluentes, el río Madeira, han registrado nuevos mínimos históricos diarios en la ciudad de Tabatinga. No hay un final a la vista —no se esperan lluvias importantes sino hasta octubre.