Barquisimeto, la ciudad crepuscular, celebra 472 años desde su fundación, pero no es solo cielos de colores, gastronomía y música, sino también una historia de 500 años marcada por terremotos, invasiones, batallas y mucho más, en este especial te mostramos a una ciudad que ha resistido en el tiempo y se ha construido más de una vez.
Conocida originalmente como Nueva Segovia de Barquisimeto, la ciudad ha evolucionado significativamente desde sus inicios como un pequeño asentamiento español. A lo largo de casi cinco siglos, ha experimentado innumerables transformaciones, conservando siempre su encanto y calidez, y consolidándose como un referente cultural y comercial en el occidente venezolano.
Los orígenes de la ciudad musical
La ciudad que hoy conocemos como la capital musical de Venezuela, surgió antes de la llegada de los españoles. Según el historiador Dalí Álvarez, el territorio que hoy ocupa Barquisimeto estaba habitado por los caquetíos, quienes fueron los fundadores del asentamiento poblacional Variquecemeto.
En 1530, Nikolaus de Federmann se convirtió en el primer europeo en explorar la zona, dejando registros escritos sobre los aborígenes, su modo de vida y su organización social. Sin embargo, la fundación hispánica de Barquisimeto, impulsada por el descubrimiento de minas de oro en Buría, data de 1552.
Álvarez señala que la ciudad fue trasladada de Buría debido a las condiciones insalubres e inhóspitas del terreno, luego de varios traslados es que en el valle denominado por los caquetíos como Variquecemeto, se establece Nueva Segovia de Barquisimeto.
La obra La Fundación de Nueva Segovia, del Hermano Nectario María, publicado en 1952, expone que cuando el conquistador Juan de Villegas vino de El Tocuyo, se encontró con un andaluz nombrado Francisco López de Triana, quien poseía una estancia en el camino que iba del Tocuyo a Barquisimeto, por tanto merece el título de primer poblador de la naciente ciudad.
La búsqueda de riquezas mineras motivó a los españoles a establecer un asentamiento en la zona, aunque las condiciones iniciales fueron adversas. A lo largo de los años, la ciudad fue trasladada varias veces hasta encontrar su ubicación definitiva.
De la Conquista a la Independencia
La ciudad, sin embargo, no tuvo una vida tranquila. Fue trasladada en varias ocasiones debido a diversos factores, como la búsqueda de mejores tierras y la amenaza de ataques indígenas. Además, sufrió el embate de invasores como Lope de Aguirre, quien en 1561 incendió la ciudad y sembró el terror entre sus habitantes.
A lo largo del siglo XVIII, Barquisimeto se consolidó como un importante centro agrícola y comercial. Sin embargo, los terremotos de 1812 y 1950 dejaron profundas cicatrices en la ciudad, destruyendo gran parte de su arquitectura colonial.
La Guerra de Independencia también dejó su huella en Barquisimeto. La ciudad fue escenario de importantes enfrentamientos, como la Batalla de Los Horcones, donde el coronel José Félix Ribas logró una contundente victoria sobre las fuerzas realistas. Sin embargo, otras batallas, como la de Tierrita Blanca y la de Barquisimeto, resultaron en derrotas para los patriotas.
Crecimiento y Consolidación
A pesar de los desafíos, Barquisimeto logró recuperarse y crecer a lo largo del siglo XIX y XX. Su ubicación estratégica la convirtió en un importante centro de comunicaciones y comercio. La ciudad experimentó un notable desarrollo urbano y cultural, con la construcción de edificios emblemáticos y la promoción de las artes.
El cuatricentenario de Barquisimeto, celebrado en 1952, fue un hito fundamental en su historia. Este evento impulsó un importante desarrollo de la infraestructura de la ciudad, con la construcción de nuevas avenidas, hospitales y centros educativos.
Un hito histórico: el cuatricentenario
En 1950, con motivo de la celebración de los 400 años de la fundación de Barquisimeto, se realizaron diversas investigaciones para determinar con precisión la fecha exacta. Aunque no se encontró el acta de fundación original, se estableció el 14 de septiembre como fecha conmemorativa, coincidiendo con el reparto de encomiendas realizado por Juan de Villegas.
Este hito histórico impulsó un importante desarrollo de la infraestructura de la ciudad, con la construcción de obras emblemáticas como la avenida José María Vargas, la avenida Pedro León Torres y el hospital universitario Antonio María Pineda. El cuatricentenario marcó un antes y un después en la historia de Barquisimeto, consolidando su crecimiento y posicionándola como un centro urbano de gran relevancia.
El historiador Dalí Álvarez destaca la importancia de este acontecimiento: «El cuatricentenario fue fundamental para poder analizar el crecimiento de Barquisimeto. También en los años 70, en los años 80 hay otro crecimiento también de infraestructura, pero lo que va a marcar al Barquisimeto que tenemos hoy en día es el Barquisimeto de los años 50».