A través de un comunicado publicado este viernes 6 de septiembre, 31 exjefes de Estado y de Gobierno miembros del Grupo IDEA, consignaron un documento ante la Corte Penal Internacional donde señalan a la gestión de Nicolás Maduro de cometer crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
“En el escrito entregado hoy a la Fiscalía – lo declara el presidente colombiano Andrés Pastrana desde la sede de la Corte Penal Internacional – y que han firmado 31 exjefes de Estado miembros del Grupo IDEA, señalan éstos el Informe presentado ante la OEA por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que califica los hechos previos y posteriores a las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio en Venezuela como prácticas de “terrorismo de Estado””, reza el documento.
Hacen saber que le explican al Fiscal de la Corte que, en ese contexto, los crímenes de lesa humanidad “que se han ejecutado y siguen ejecutando en línea de continuidad, incluyendo la reciente orden de aprehensión contra el verdadero presidente electo, Edmundo González Urrutia, son la obra de una estructura militar operacional cuya cadena de mando ejerce directamente Nicolás Maduro Moros, en calidad de militar activo y como comandante en Jefe”.
El Grupo IDEA detalla en el texto que, le refirieron a la Corte y su Fiscalía que, luego de aprobarse por la Asamblea Nacional Constituyente la Ley Constitucional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en el año 2020, firmada por el exmilitar Diosdado Cabello Rondón, Maduro Moros encabeza como oficial Comandante en Jefe y “ordena sin mediación institucional las operaciones militares de represión sistemática al pueblo venezolano y a los líderes de las fuerzas democráticas cuya conducción ejerce María Corina Machado”.
Solicitud de los expresidentes
Los exjefes de Estado y de Gobierno del Grupo IDEA, por consiguiente, le han solicitado a la Corte para que, junto a su función sancionatoria contra «los miembros de la cadena militar responsable y en denuncias consignadas por varios Jefes de Estado y la misma Secretaría General de la OEA», despliegue con urgencia su igual función preventiva para “detener la ola de violaciones generalizadas y sistemáticas de derechos humanos, los crímenes de lesa humanidad que se ejecutan a través de desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, tortura y violencia sexual”.