—¡¡Si tocan a una, respondemos todas!!—
Esta frase forma parte de la canción «Vivir sin miedo» de la cantautora mexicana: Viviana Monserrat Quintana, mejor conocida como: Vivir Quintana
Y… aquí transcribo la letra de: «Vivir sin miedo»
una hermosa canción que se ha convertido en un himno contra la violencia de género.
«Que tiemble el estado, los cielos, las calles
Que tiemblen los jueces y lo judiciales
Hoy a las mujeres nos quitan la calma
Nos sembraron miedo, nos crecieron alas
A cada minuto, de cada semana, nos roban amigas, nos matan hermanas Destrozan sus cuerpos, los desaparecen
¡No olvide sus nombres, por favor, señor PRESIDENTE!
Por todas las compas marchando en Reforma
Por todas las morras peleando en Sonora
Por las comandantas luchando por Chiapas
Por todas las madres buscando en Tijuana
Cantamos sin miedo, pedimos justicia
Gritamos por cada desaparecida
Que resuene fuerte:
«¡¡NOS QUEREMOS VIVAS!!»
—Que caiga con fuerza el feminicida, que caiga con fuerza el feminicida—.
Yo todo lo incendio, yo todo lo rompo, si un día un fulano te apaga los ojos Ya nada me calla, ya todo me sobra
¡¡SI TOCAN A UNA RESPONDEMOS TODAS!!
Soy Claudia soy Esther, y soy Teresa,
Soy Ingrid, soy Fabiola y soy Valeria
SOY LA NIÑA QUE SUBISTE POR LA FUERZA…
Soy la madre que ahora llora por sus muertas.
¡Y soy esta que te hará pagar las cuentas!
¡Justicia, justicia, justicia!»
Una canción cargada de SORORIDAD, mostrándonos la cruda realidad de un mundo en donde la corrupción de la masculinidad y el PODER del hombre maltratador hace temblar a muchas niñas y mujeres.
La violencia de género es un fenómeno que, desafortunadamente, sigue presente en nuestra sociedad actual. Se manifiesta a través de diferentes formas de agresión contra la mujer.
Detrás de este tipo de comportamientos violentos, se esconde una problemática más profunda relacionada con la masculinidad y el PODER
Definiendo la violencia de género:
La violencia de género abarca cualquier acto de violencia basado en el género que resulte o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer.
Este tipo de violencia tiene sus raíces en desigualdades de género arraigadas en la sociedad, donde se ha normalizado la dominación masculina sobre las mujeres.
El papel del hombre maltratador:
El hombre maltratador ejerce un poder destructivo sobre la mujer, basado en una concepción distorsionada de lo que significa ser hombre.
En muchos casos, el maltratador busca mantener un control absoluto sobre la vida de la mujer, utilizando la violencia como herramienta para infundir miedo y sumisión.
El poder del hombre maltratador radica en su capacidad para intimidar, manipular y humillar a la víctima, minando su autoestima y su autonomía.
A menudo, el maltratador utiliza su posición de superioridad en la relación para justificar sus acciones violentas, creando un círculo de abuso difícil de romper.
Rompiendo el ciclo de la violencia de género:
Para combatir eficazmente la violencia de género, es crucial desafiar las estructuras de poder que perpetúan este tipo de comportamientos.
Es necesario promover una masculinidad sana y constructiva, basada en el respeto mutuo y la igualdad de género.
Los hombres tienen un papel fundamental en la lucha contra la violencia de género, ya que son parte inherente del problema y, por lo tanto, también deben formar parte de la solución.
Es imprescindible que los hombres reflexionen sobre sus actitudes y comportamientos, cuestionando los estereotipos de género que perpetúan la violencia y fomentando relaciones basadas en el respeto y la empatía.
Solo a través de un cambio profundo en nuestras concepciones sobre el género y el poder, podremos construir una sociedad más justa y libre de violencia para todas las personas.
¡Juntos podemos romper el ciclo de la violencia de género y construir un futuro más igualitario y seguro para todos!
¡¡SI TOCAN A UNA RESPONDEMOS TODAS!!
Natividad Castillo P. (Natty)
