El joven violista venezolano, Pedro Méndez, está haciendo historia en la música clásica. Originario de Barquisimeto, ha conquistado los escenarios internacionales con su talento y dedicación, su incorporación a la prestigiosa Orquesta Sinfónica de Dallas, con un contrato temporal a dos años y un Grammy, son algunos de los logros de este músico larense.
En entrevista para El Impulso, Méndez comentó que también tiene un contrato de puesto fijo de asistente en la Filarmónica de Illinois, integra un cuarteto de cámara junto a otros venezolanos y es miembro de la Orquesta de Chautauqua, en Nueva York.
«Le diría a los jóvenes que nunca es tarde que nunca es tarde que no hay imposible cuando tienes un sueño, cuando de verdad quieres algo, si pasa, nunca dejen de creer para Dios no hay nada imposible», resalta.
Experiencias internacionales
Ha participado en importantes giras y festivales de música, como Classical Tahoe en Nevada y Chautauqua Music Festival. Al igual que en diversas orquestas, tales como, la Orquesta Lírica de Chicago y la Orquesta Cívica de Chicago durante los años 2021-2023, donde tocó en el ciclo de Brandemburgo, interpretando el Brandemburgo número 6 como solista.
Méndez ha estado bajo la batuta de importantes directores a nivel mundial, como Gustavo Dudamel, Ricardo Muti, Fabio Luisi, Rosan Milanov, Donald Runnicles, Timothy Muffit y Ken-David Masur y ha compartido escenario con solistas de la talla de Maxim Vengerov, Daniil Trifonov, Paul Huang y Agustin Hadelich, también la destacada cantante Isabel Leonard, a quien admira, entre otros.
El venezolano más joven en obtener un Grammy
Pedro Méndez, de 28 años, es posiblemente es venezolano más joven en conseguir un Grammy, galardón, que considera “el Oscar de la música”. Recibió el gramófono en 2023, por su participación como principal asistente de violas de la Orquesta de Cámara “A Far Cry” en la grabación del álbum «Rounds» de Jessie Montgomery, en la categoría de “Composición Clásica Contemporánea”.
La grabación fue realizada en Boston, Massachusetts, y compuesta para orquesta de cámara y piano, con el solista Awadagin Pratt.
Estudios musicales
El barquisimetano recuerda que su formación musical inició en El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, en el área de coros para luego comenzar a formarse con la ejecución del violín en la Academia Latinoamericana del Violín y el Conservatorio de Música Vicente Emilio Sojo, donde obtuvo el título de Ejecución del Violín.
Con 15 años Pedro se convirtió en profesor del Sistema, llegando a ser director de la Academia Latinoamericana de Violín en Barquisimeto. En 2019, mientras culminaba la Licenciatura en Música, en la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), obtuvo una beca para cursar estudios en la Universidad de Roosevelt en Chicago, de la que egresó en 2024.
Formación en Estados Unidos
Pedro comenta como sus estudios en la Universidad de Roosevelt (2019-2024) transcurrieron a través de un complejo proceso de adaptación y crecimiento, desde aprender el idioma hasta adaptarse al estilo musical propio de la cultura americana, tan diferente de los ritmos latinos. Sin embargo, rescata que esta y otras experiencias vividas durante los últimos años fueron oportunidades que le abrieron puertas y le permitieron alcanzar sus metas.
«Siento que es una de las mejores decisiones y me siento súper súper afortunado, bendecido de tener pues el apoyo de mis padres con la música siempre, el apoyo de mi profesores y el apoyo de la Universidad donde llegué, que me apoyaron muchísimo», expresó.
En el mismo sentido, Pedro agradece a las personas que lo apoyaron para viajar a estudiar en Estados Unidos, oportunidad que considera como un «milagro» y resalta el privilegio de tocar con algunos de los artistas que más admira desde su juventud.
Especialmente, menciona a los prestigiosos maestros Almita y Roland Vamos, quienes lo acogieron no solo como su alumno, sino a través de una relación personal muy cercana, manifestando un cariño y dedicación especial a sus estudiantes venezolanos. Además, Pedro resalta que ha tenido el privilegio y el honor de compartir tarima con Almita Vamos, quien a sus 86 años es una violinista prestigiosa.
Gracias a un préstamo de por vida de una colección de instrumentos anónima en memoria de Margaret Harvey, actualmente toca una viola italiana hecha por Ferrucio Varagnolo en 1916 y un arco Arthur Baltitude, anteriormente perteneciente al prestigioso solista James Ehnes.
Orgullo por el Sistema de Orquestas
Como otros talentos instruidos en el seno del Sistema de Orquestas, Pedro afirma sentirse muy orgulloso de su experiencia y la formación que recibió, “porque en el Sistema nos crearon una visión, no sólo sobre la música, sino sobre nuestra manera de pensar como individuos”.
En este sentido, destaca que esta visión es una manera de “ver la vida” y recuerda una frase que les decían “tocar y luchar”, resaltando la importancia de tocar el instrumento, como parte de un esfuerzo por la excelencia, que más que estudiar, consiste en hacerlo bien y tener “hambre de éxito”, lo que considera una característica de los músicos venezolanos.
“Recuerdo que mis profesores siempre me decían que a donde yo fuera, tenía que ser el mejor, luchar por los mejores puestos, era como una filosofía de El Sistema, eso me ha acompañado acá”, manifiesta.
Pedro cuenta su historia desde el corazón y asegura que nunca es tarde, «no hay imposible cuando tienes un sueño, cuando de verdad quieres algo, si pasa«, este joven barquisimetano resalta la importancia de tener a Dios en el corazón y ser buenas personas como una parte fundamental del camino por cumplir los sueños.