Una sombría atmósfera invadió este sábado la conmemoración del aniversario número 33 de la independencia de Ucrania, al tiempo que la lucha de la nación para repeler la invasión total de Rusia llegaba a su 30mo mes. No se planearon fuegos artificiales, desfiles o conciertos y, en cambio, los ucranianos conmemoraron el día con homenajes a los civiles y soldados muertos en la guerra.
Los ucranianos inundaron las redes sociales con mensajes de gratitud y apoyo, saludándose unos a otros y agradeciendo a los soldados en el frente. En esta manifestación de unidad, todos reconocen que los dos años y medio han sido duros, y la fatiga es cada vez mayor.
“La independencia es el silencio que experimentamos cuando perdemos a nuestra gente”, dijo a la nación el presidente Volodymyr Zelenskyy. “La independencia desciende a los refugios durante un ataque aéreo, sólo para perdurar y volver a levantarse para decirle al enemigo: ‘No lograrás nada’”.
En el centro de Kiev, las personas desfilaban vistiendo “vyshyvankas” festivas, que son camisas bordadas tradicionales de Ucrania. Algunos se tomaban fotos con la bandera nacional amarilla y azul frente a un letrero que dice “Amo a Ucrania”, cerca de un monumento improvisado en honor de los soldados caídos.
Muchas personas acudieron a la capital desde distintas regiones de Ucrania para la ocasión. Ucrania declaró su independencia de la Unión Soviética el 24 de agosto de 1991.
“Podemos celebrar esta fiesta gracias a nuestros soldados —gracias a ellos estamos vivos”, dijo Oksana Stavnycha, que llegó a Kiev desde Vinnytsia con su esposo y su hija de siete años. Planeaban dejar flores para honrar a los soldados ucranianos caídos.
“El precio de nuestra independencia es muy alto y diariamente muchos hombres da su vida por ella”, añadió.
Zelenskyy señaló que la guerra, iniciada por Rusia el 24 de febrero de 2022, se ha propagado hasta su propio territorio. “Aquellos que buscan sembrar la maldad en nuestra tierra recogerán sus frutos en la suya propia”, dijo, refiriéndose a la incursión ucraniana en la región rusa de Kursk a principios de este mes.
