“La Paja Sabanera”. Humilde, sencilla, común, la Paja Sabanera adquiere por sí misma, un incuantificable valor; adaptada a climas adversos y ataques malsanos; su poder de sobrevivencia está demostrado cuando los vientos la doblan temporalmente o cuando la candela la quema, la subyuga y hasta la desaparece visualmente pero cuando la acaricia una brisa suave y caen las primeras gotas de lluvia y, hasta con el rocío matutino, “retoña,” reverdece y se yergue más fuerte embelleciendo el paisaje con su verdor.
Richard Bach asevera:
“No existe problema que no te aporte un don. Busca los problemas porque necesitas dones”.
No creo que los problemas haya que buscarlos, pero debemos preguntarnos: ¿Para qué en Venezuela? A veces parece qué los mensajes de esperanzas suenan vacíos, fuera de contexto o extemporáneos y nos olvidamos que el agua siempre se decanta. Nos olvidamos que una parte del pueblo fue quien condenó a Jesús, mientras Pilatos se lavaba las manos.
Tenemos el sagrado deber de respetar la decisión de las mayorías, acertadas o no, es la imposición y aceptación de los sistemas democráticos.mEs deber cívico el felicitar a todo aquel que cree en el sistema que ganó aun cuando no se compartan sus postulados. Eso es lo que llamamos pluralidad, y aquellos que trabajen por el bienestar colectivo, con desprendimiento de apetencias personales, deben ser oídos; analizando sus planteamientos de manera objetiva y pragmática.
Siempre he dicho que, de mí, tomen lo bueno y desechen lo malo, mi intención es buena. Que soy un ser humano que ejerce el deber de ejecutar el derecho de errar por qué, no pretendo ser Dios, el único Ser perfecto y que perdonen mi ignorancia política, profesión que admiro en su autenticidad pero que no comparto en su tergiversación.
Se dice que:
“Valor es miedo vencido y… la hora más obscura es una hora antes del amanecer.”
Venezuela se masifica y se magnifica, y lo hará siempre, en la manera en que sus habitantes, “pacíficamente,” enfrentemos las adversidades, superándolas con gallardía, minimizando el dolor y valorando cada logro alcanzado, por pequeño que sea. Somos ejemplo para el mundo.
Recordemos el “Poder de Uno” … ¡El río más grande comienza con una gota de agua!
El segundo próximo forma parte de nuestro futuro. Cuando existe un trabajo por realizar no debemos excusar nuestra inacción con la falta de iniciativa o emprendimiento de algunos; el mañana siempre lo comenzamos a construir ahora.
“No podemos ni debemos ser como el caballo de bronce que siempre tiene la pata levantada, pero… nunca da el paso”.
Venezuela, la Patria Grande… ¡Triunfa siempre!
Necesitamos de buena voluntad, fe, confianza, de trabajo creador para demostrar nuestras capacidades y mejores disposiciones.
Más temprano que tarde se encontrará la manera de superar la grave crisis social y económica que destruye a la república que otrora fue prospera y segura, tanto en el ámbito personal como en lo que, a la Seguridad Jurídica, se refiere.
Venezuela, ha sido privilegiada por Dios; al extremo que hay quien asevera que el Todopoderoso… ¡Es venezolano!
Tenemos un país pródigo en riquezas y el bien más valioso que tiene es su “CAPITAL HUMANO.”
El talento formado en sus magnas casas de estudio ha sabido asimilar los principios y valores inculcados en lo profundo de los hogares que conforman las familias venezolanas y las de aquellos extranjeros que han sabido valorar a la “Tierra Mágica” que los cobijo y los adoptó como hijos propios.
Debemos superar los obstáculos, sobre todo, a la violencia. El mejor instrumento del cual disponemos es el “Estamento Legal venezolano vigente” que ha sido ejemplo para los ciudadanos del mundo. El espíritu libertador que heredamos de nuestros ancestros ha sido nuestro inmenso baluarte, y tenemos el deber de salvaguardarlo, y de ejercer, los derechos que nos otorgan la Constitución Nacional, las leyes y reglamentos establecidos bajo preceptos tradicional e internacionalmente aceptados en el marco del espíritu, propósito y razón del legislador probo.
La nación cuenta con nosotros como los padres cuentan con sus hijos y los hijos cuentan confiadamente en sus padres… “Todo depende de la semilla que sembremos y de su cuido.”
“Si pretendemos cosechar café no podemos sembrar estacas de espinito.”
Maximiliano Pérez Apóstol
