El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este miércoles que su postura sobre los problemas políticos en Venezuela ha contribuido a que la violencia en el país no se desborde.
Durante su conferencia matutina, el mandatario mexicano defendió la posición que comparte con sus homólogos de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Colombia, Gustavo Petro, de esperar los resultados definitivos en Venezuela, a pesar que el Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró presidente reelecto a Nicolás Maduro.
“Lo que nosotros sostuvimos con el presidente Lula y con el presidente Petro, que no haya violencia, y ese llamado ha ayudado porque no deja de haber confrontación, pero no está desbordada la violencia”, expresó López Obrador.
Momentos antes, más de 25 organizaciones civiles en Caracas pidieron a los gobiernos de Latinoamérica tomar acciones concretas para detener la crisis de derechos humanos en Venezuela. Estas organizaciones documentan 25 fallecidos y más de 2.400 detenidos tras las protestas contra el resultado oficial de las elecciones del 28 de julio.
En contraste, López Obrador remarcó que “afortunadamente no ha habido desbordamientos” en el país suramericano. “Ahora van a decir mis adversarios que estoy negando que haya violencia en Venezuela. No, no estoy negando, nada más que una confrontación con tantos intereses de por medio es para que fuese peor”, manifestó.
El presidente de México criticó la “cargada” internacional y el “reagrupamiento del movimiento de derecha” en torno a Venezuela, cuestionando que la Organización de Estados Americanos (OEA) y el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, hayan reconocido la victoria del opositor Edmundo González Urrutia.
López Obrador insistió en que México debe esperar antes de reconocer a algún candidato vencedor y que confía en lo que decidan los órganos electorales. Además, opinó que “todo iba muy bien” el día de los comicios “y en la noche empiezan a descomponerse las cosas y no se presentan resultados ni de un lado ni del otro”.