La ciudad de Barquisimeto amaneció este miércoles bajo una calma inusual, contrastando con los días previos marcados por la tensión política. Un recorrido realizado por el equipo de El Impulso por distintas zonas de la ciudad reveló un panorama de calles prácticamente desiertas, con una oferta de transporte público muy limitada y una considerable disminución en la actividad comercial.
En el este y oeste de la ciudad, la presencia de personas en las calles fue escasa durante las primeras horas de la mañana. A medida que avanzó el día, se observó un ligero incremento en la movilidad, aunque sin alcanzar los niveles habituales.
El centro de Barquisimeto, específicamente en las avenidas 20 y 21, presentó un mayor movimiento comercial, aunque aún lejos de la actividad acostumbrada.
Terminal de Barquisimeto
El Terminal de Pasajeros de Barquisimeto, por su parte, abrió sus puertas en horas de la mañana pero tuvo que cerrar debido a la ausencia de pasajeros y autobuses. En horas de la tarde, volvieron a abrir, aunque se repitió la misma situación. Edgar Mogollón, coordinador de operaciones del terminal, explicó que los propietarios de las unidades decidieron resguardar sus vehículos por motivos de seguridad.
Ante esta situación, algunos transportistas particulares han aprovechado la oportunidad para ofrecer servicios de traslado en carros por puestos a destinos como Caracas y Valencia, a precios en precios que rondan hasta los 40 dólares.
Los habitantes de Barquisimeto esperan que para el día de mañana jueves la situación se normalice y la ciudad recupere su ritmo habitual. Sin embargo, el panorama político actual ha generado incertidumbre y ha llevado a muchos ciudadanos a adoptar medidas de precaución.