La «Participación Urbana Inteligente» en la era de la digitalización redefine la inclusión de los ciudadanos en el diseño y la gobernanza urbana. Utilizando tecnologías digitales, este enfoque mejora significativamente la participación y la toma de decisiones, facilitando la creación de ciudades más adaptativas y transparentes que reflejan verdaderamente las necesidades y deseos de sus habitantes.
La participación ciudadana es vital para la sostenibilidad y la aceptación comunitaria de los proyectos de desarrollo urbano. Actualmente, los gobiernos están implementando estrategias innovadoras como el desarrollo de visiones estratégicas colaborativas a través de plataformas web interactivas y la realización de webinars. Estas herramientas no solo promueven una mayor transparencia, sino que también aseguran que el desarrollo urbano sea inclusivo y representativo de todos los ciudadanos. Este enfoque participativo es fundamental para el desarrollo de ciudades que son inteligentes tanto en tecnología como en gobernanza y
planificación.
Un proyecto destacado que ilustra este enfoque es la «Solución de Participación Urbana Inteligente para la Confianza: Innovaciones en la Participación Urbana Inteligente», que desarrollé en 2023 en Alemania. Como Consultor Senior en Smart City y Smart Participación, lideré la implementación de un protocolo que facilita una interacción multidireccional y continua entre ciudadanos, gobierno y otros actores clave, eliminando las barreras idiomáticas y físicas. Este proyecto emplea la metodología de «Redes Líquidas de Co-Creación«, proporcionando una plataforma de comunicación multidireccional que permite el intercambio de experiencias y conocimientos en cualquier idioma y momento, mejorando la calidad de la integración y la interacción social mediante la confianza.
Un ejemplo concreto de cómo este modelo podría aplicarse localmente es en el Estado Lara, Venezuela, donde el manejo del agua se ha complicado debido a infraestructuras obsoletas y períodos de sequía. Implementar un proyecto de «Participación Urbana Inteligente» allí podría involucrar el uso de digitalización para facilitar la colaboración entre los ciudadanos y el gobierno, co-creando soluciones sostenibles para la gestión del agua. Esta estrategia no solo promovería una gestión más transparente y eficiente del agua, sino que también empoderaría a los ciudadanos y fortalecería la cohesión social en la región, asegurando que las soluciones reflejen las necesidades reales de la comunidad.
Además, adoptar este enfoque participativo inteligente puede transformar la dinámica tradicional entre gobiernos y ciudadanos hacia una relación más colaborativa y horizontal. Los proyectos urbanos desarrollados con la participación activa de la comunidad suelen ser más aceptados y enfrentan menos resistencia, minimizando retrasos y conflictos durante la implementación. Este modelo de gobernanza colaborativa no solo mejora la calidad de los proyectos urbanos, sino que también fortalece la democracia local, haciendo que los gobiernos sean más receptivos y sensibles a las necesidades de sus ciudadanos
Dr. Roberto Ramírez Basterrechea