El pastor evangélico Javier Bertucci se postuló por segunda vez a la presidencia de la república para los comicios a celebrarse el 28 de julio.
Antes compitió en las cuestionadas elecciones de 2018 en las que resultó reelecto Nicolás Maduro para un segundo mandato. En esa ocasión sacó un poco más de 1 millón de votos, ocupando el tercer lugar.
Para esos comicios la mayoría de los factores de la oposición venezolana decidió no participar al considerar que eran elecciones ilegítimas e inconstitucionales. Sin embargo, además de Bertucci también compitió Henry Falcón, quien fue el abanderado del partido Avanzada Progresista y ambos afirmaron que sus organizaciones formaban parte de la llamada Alianza Democrática. Hoy día, Falcón ya no forma parte de Avanzada Progresista. En cambio, fundó una nueva organización denominada partido Futuro.
La organización postulante de la candidatura del también diputado a la Asamblea Nacional de 2020 es El Cambio, una estructura que generalmente realiza actividades benéficas en comunidades populares con un mensaje religioso implícito. En otrora se llamaba El Evangelio Cambia, organización que utilizaba Bertucci para sus prédicas religiosas en todo el territorio nacional.
“Esta es mi segunda oportunidad”, expresó el pastor evangélico en la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE, al momento de su inscripción formal como candidato presidencial en el 2024 en el mes de marzo. Se describió a sí mismo como un “líder social y político a nivel nacional”, luego de haber sido “un pastor desconocido”, afirmó.
En la conferencia de prensa señaló que “somos representantes de cientos y miles de venezolanos que hoy claman por un cambio y yo, con humildad pero con firmeza, vengo a poner mi nombre para que el venezolano tenga el derecho de poder escoger a alguien con capacidades, a alguien que ha sido coherente en el tiempo”, al tiempo que aseguró que busca la reunificación, la tolerancia y la paz nacional.
Indicó que “parte de la reconstrucción que necesita Venezuela tiene que ver con la reconstrucción social» y con «la recuperación de los valores en la sociedad» y, en su opinión, «nada mejor que la fe cristiana para lograrlo”.
“Si la fe en Jesucristo puede cambiar a un individuo, también puede cambiar a un país”, expresó Bertucci en el mes de marzo, quien agregó que, de llegar a la Presidencia, trabajará en los sectores económico, salud y educación.
A pocos días de la elección presidencial el despliegue de su campaña electoral ha sido bastante modesta con pocas actividades de calle y apariciones mediáticas.