Héctor Cordero, vicepresidente de Encuentro Ciudadano, alzó su voz contra lo que considera una medida discriminatoria por parte del gobierno de Nicolás Maduro. Según su testimonio, el restaurante Baguette, ubicado en Lechería, se negó a atender a la directiva de su partido debido a una supuesta instrucción gubernamental.
«Bueno, hoy estuvimos acá en el restaurante Baguette, en Lechería, con la dirigente de Encuentro Ciudadano, Delsa Solórzano. Y pues, por supuesto, la información fue que no nos pueden atender porque hay una instrucción del gobierno de no despachar ningún tipo de alimentos y bebidas a las personas que se oponen a este régimen. Esto va a cambiar, esto va a cambiar el 28, y de verdad, pues, con el voto de cada uno de nosotros, retornaremos al respeto que debe haber para cada ciudadano», declaró Cordero.
La dirigencia opositora se encontraba en Anzoátegui para ser pare de la última presentación de Edmundo González Urrutia, candidato de la Unidad, en compañía de la coordinadora de Vente Venezuela, María Corina Machado.
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La denuncia no es aislada. La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) y organizaciones como Acceso a la Justicia han señalado que la agencia tributaria ha «sancionado» a diversos comercios, hoteles y restaurantes por atender a líderes opositores, alegando irregularidades en la documentación.
En otro caso, González, exembajador en X, denunció que el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) cerró el restaurante «Asados Taguanes» en el estado Cojedes. Este establecimiento había brindado servicio a su familia tras un acto político. La pregunta que surge es: ¿por qué castigar a los trabajadores por recibir a quienes piensan diferente? González agradeció la cordial atención con una sonrisa y mantuvo la esperanza en un cambio próximo.
