Solamente durante el primer gobierno de Carlos Andrés Pérez, con la creación del “Fondo Nacional del Café, FONCAFÉ”, se estableció un sistema, más o menos justo, que reconocía, para el cálculo del precio al productor, el 70% del valor de una taza de café en barra. Pero poco duró esa alegría, la industria se impuso y logró sus objetivos… “Precios Bajos a Nivel del Productor.”
No obstante, los caficultores protestábamos, íbamos a Caracas, quemábamos café en el extinto Congreso Nacional, llegábamos hasta Miraflores y generalmente conseguíamos lo que llamábamos un precio de sostenimiento que nos permitía sobrevivir.
Para 1998, el contrabando campeaba y el descubrir en Biscucuy y en Araure, unas gandolas cargadas con café proveniente de Colombia contaminado con Broca, nos llevó a realizar una “LUCHA ÉPICA,” en defensa de nuestros Derechos Humanos, constitucionales y legales, por la defensa de nuestros ingresos monetarios y en protección de nuestros cultivos…
Llegamos a ser cuatro mil quinientos treinta caficultores los que tomamos y nos atrincheramos durante dieciocho días en la sede del extinto Ministerio de Agricultura y Cría, UEDA-LARA. Esas dependencias también fueron tomadas en Yaracuy, Portuguesa y Mérida, los caficultores merideños cerraron la ciudad de Mérida.
¡Logramos que se parara el contrabando de café y se reconocieran precios justos a nivel de productor!
Para el año 1998, Venezuela producía 1550.000 quintales de café/año; consumíamos 950.000 quintales/año y “EXPORTÁBAMOS” 650.000 quintales de café al año.
Desde entonces no existen estadísticas cafetaleras creíbles. En el año 2004, con números de “FONCAFÉ” del año 1997, realizamos el único Plan Café, que ha contemplado el reconocimiento justo de los precios a nivel del productor, el ministro Arnoldo Márquez, nos entregó el proyecto aprobado la noche del día 17 de diciembre de 2004 y el 10 de enero de 2005 estaba fuera del ministerio.
¿Quién ha investigado sobre las inmensas cantidades de dinero que se ha perdido en los diferentes Planes Café? ¿Qué pasó con las exportaciones de Café Venezuela a los Estados Unidos para ser distribuidas en las estaciones de servicio Citgo? ¿Recuerdan aquel sarao que hicieron con la inauguración de éste plan que supongo no pasó de aquel festín, pero con millones de dólares aprobados, ¿Cuántos fueron los camiones entregados por Chávez para el beneficio de los caficultores (Yo había sugerido que podrían haberse utilizado como transporte para los caficultores en zonas de difícil acceso), ¿Dónde están, y por quién en qué, son utilizados?
Reflexión y raciocinio deben imperar, tenemos la experiencia suficiente producto de las dificultades enfrentadas; tenemos el capital humano necesario y apertrechado con buena voluntad. Imperiosamente se debe rescatar y apoyar los centros de investigación destruidos, Bramón, El Laurel y el último bastión de investigación cafetera del país y el único en Nuez de Macadamia… “La Finca Las Lomas”, devastado por una comuna que se auto denomina Argelia Laya.
Los monopolios son inconstitucionales. En la actualidad, uno de los factores con más incidencia negativa sobre la actividad cafetera en Venezuela es el contrabando de café, presuntamente legalizado con importaciones incontroladas, pues además de ser competencia desleal existe el peligro permanente de ser portador de enfermedades de fácil y rápida transmisión a los cultivos, como lo es el caso de la Broca o pueda afectar la salud de animales y la de los seres humanos.
¿Quién (es) dispone (n) del capital necesario para financiar las importaciones?
¿Por qué no se ejecuta el “Estamento Legal” que protege a la caficultura?
Quedó plasmado en las Memorias del I Congreso Integral del Café 2001 que, en Venezuela a la actividad cafetalera la protege la Constitución Bolivariana de Venezuela que parte de principios fundamentales At. 3) y contempla diferentes leyes, dirigidos a regularizar esta actividad, a fin de proteger (Art. 112, 113, 114) y garantizar su adecuada ejecución, dentro de desarrollos sociales (Art. 102, 107, 305, 306, 307), económicos (Art. 299, 310) y ecológicos (127, 129, 304).
La caficultura debe estar por encima de los politiqueros y pregunto:
¿Qué pasó con la Ley de Mercadeo Agrícola y con la sentencia sobre el expediente 05-0367 de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia que dejo expresa la jurisprudencia sobre la indexación de los precios del café a nivel de productor aprobada en Junta Nacional del Café realizada en mayo de 2004, ratificada en junio del mismo año?
¿Hacen falta más leyes? ¿Cuál es la verdadera finalidad?
Maximiliano Pérez Apóstol