“El socialcristianismo una huella indeleble” ha sido la jornada política más importante que hemos presenciado, estos primeros 24 años del siglo XXI en Barquisimeto, convocada por las asociaciones civiles “Agrupa y Decode” (Movimiento en Defensa de la Constitución y la Democracia) en el Colegio de Médicos de Barquisimeto el pasado 6 de junio, “con contenido político pero no partidista “ evento por lo demás, moderado por el diputado Rafael Ignacio Montesdeoca, orgullosos de su padre, donde se dieron cita, toda una generación política larense de los años 1960 a la fecha, que se caracterizó por su formación política y justo es reconocerlo, en los muchachos de la Juventud Revolucionaria Copeyana, que con el tiempo, le prestaría servicios al país como diputados al Congreso de la República, Asambleas Legislativas, Alcaldes, Concejales y gobernadores de estado, casos emblemáticos Ibrahim Sánchez Gallardo, Enuman Suarez, Ramón Guillermo Aveledo, Manuel Salvador Ramos y Rafael Soto Loyo, Nelson Piña, bajo el indiscutible liderazgo de Rafael Andrés Montesdeoca.
Si Acción Democrática nació, inspirada en la realidad venezolana de 1931, a tenor del pensamiento de Rómulo Betancourt en el llamado “Plan de Barranquilla” COPEI lo haría de la doctrina social de la iglesia católica, a partir de interpretaciones bíblicas y la famosa Encíclica “Rerum Novarum” del Papa León XX, previo a ello, el Ing. Luis Gerardo Oropeza recordaría como sería el ilustre caroreño Ildefonso Riera Aguinagalde a mediados del siglo XIX, quien nos dejaría el pensamiento cristiano en el orden político, económico y social, aplicado para Venezuela.
¿Que se buscó con ello? Sin duda, rememorar las luchas de miles de personas, que desde distintos rincones del estado Lara confiaron en las ideas del socialcristianismo, que tomará como plataforma política el partido COPEI, liderado por el doctor Rafael Caldera. Idea que no fue fácil, ante el anclaje de Acción Democrática, pero que no desmayaría sus aspiraciones para hacerse del poder. Lo que se quiso destacar fue, examinar “la huella humana, espiritual, cultural y física del socialcristianismo” a buen decir del invitado Cesar Pérez Vivas, que en palabras del ex gobernador Ibrahím Sánchez Gallardo, resultó ser, una “Memoria y Cuenta” de ese COPEI larense, en el que se enroló a partir de 1960, como estudiante, terminado en el corazón y la conciencia de los copeyanos, con las dos derrotas (1968-1979) a la otrora poderosa Acción Democrática y enorgullecido, con la obra de esos dos gobiernos en nuestra entidad federal ¿el cómo se logró? Sin duda, en la constancia y la unidad para esos propósitos. Allí, el periodista Jorge Euclides Ramírez al irse la luz (por extraña casualidad) señaló que, “en medio de la oscuridad que nos mantiene el régimen hay futuro”
Por su parte, el doctor Manuel Salvador Ramos, de esa generación de jóvenes socialcristianos, nos emitió el historicismo de COPEI con dos interesantes conclusiones. La primera, al considerar no como un vulgar golpe de Estado, la acción del 18 de octubre de 1945, sino como una verdadera revolución política y social. Con ella, se lograría la primera Constitución democrática del país. Sin ella, no hubiéramos conocido el régimen de partidos políticos, el derecho a elegir y ser elegido en igualdad de condiciones para el hombre y mujer, la masificación de la educación y una política petrolera digna de los intereses de la República. Otro concepto expuesto por Ramos fue, el de rechazar el sarcasmo, de llamar a los gobiernos de 1959-1998 como “cuarta república”, cuando lo correcto es, los “gobiernos de la Constitución de 1961”
Hasta aquí, la minuta que del precedente acto, llevamos con tres conclusiones. El regreso al análisis político con la experiencia histórica, y visión de futuro, por lo que hacía años que no veíamos tantos copeyanos juntos. Luego, la presencia de dirigentes de otras referencias ideologías distinta a socialcristianos y la más importante, la ausencia de los dirigentes “Dientes rotos” ariscos a toda actividad de orden político, cultural y por supuesto, tampoco la clientela taquillera que no contaminara el ambiente con una interrogante ¿de repetirse ese tipo de eventos en toda Venezuela, podríamos presenciar la resurrección del socialcristianismo venezolano una vez más?
Jorge Ramos Guerra