El gobierno de Chile, liderado por el presidente Gabriel Boric, ha emitido una nota de protesta dirigida a Venezuela. Esta acción responde a las controversiales declaraciones emitidas por Tarek William Saab, fiscal general venezolano, quien implicó a agencias de inteligencia chilenas en el homicidio del exmilitar y crítico del chavismo, Ronald Ojeda, sucedido en Santiago el pasado mes de febrero.
«Instruí al canciller presentar una nota de protesta como corresponde en los canales diplomáticos», dijo.
El mandatario chileno enfatizó la seriedad y autonomía de las instituciones de su país, destacando la investigación en curso por parte del Ministerio Público como un proceso riguroso y meticuloso. Boric ha solicitado a la fiscalía venezolana que, de poseer evidencia concreta y fiable, la compartan con las autoridades chilenas para facilitar la investigación.
«Chile es un país serio, donde las instituciones funcionan, donde hay separación de poderes, donde el Ministerio Público está llevando una investigación seria y responsable», argumentó.
Boric también ha hecho un llamado al gobierno de Nicolás Maduro para cooperar en la captura de los responsables del asesinato de Ojeda, subrayando que Chile continuará buscando justicia tanto en el ámbito bilateral como en plataformas multilaterales.
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«Lo que nosotros hemos exigido es la colaboración del gobierno venezolano para atrapar a los delincuentes que asesinaron al señor Ojeda, por lo tanto, lo seguiremos llevando tanto a través de relaciones bilaterales, pero también en instancias multilaterales», concluyó el mandatario chileno.
Más temprano, el canciller chileno, Alberto van Klaveren, había rechazado rotundamente las acusaciones de Saab, calificándolas de «inaceptables». A pesar de la gravedad de las declaraciones, el gobierno chileno ha aclarado que no se considera una ruptura de las relaciones diplomáticas con Venezuela en este momento.
Ronald Ojeda, quien se había distanciado del régimen de Maduro y había obtenido asilo político en Chile, fue secuestrado el 21 de febrero en Santiago. Diez días después, su cuerpo fue descubierto enterrado bajo un bloque de cemento en las afueras de la capital chilena.
Los alegatos del fiscal de Venezuela
Las acusaciones de Saab sugieren que el secuestro y asesinato de Ojeda podría haber sido una operación coordinada por servicios de inteligencia chilenos y extranjeros, posiblemente con motivaciones ocultas. Estas declaraciones han provocado una respuesta firme de Chile.
«En esta operación pueden haber participado cuerpos de inteligencia de Chile y extranjeros con intereses espurios», confesó el Fiscal venezolano en su última presentación.