Sacudida por una serie de ataques y asesinatos de candidatos, el miércoles 29 de mayo, llegó a su fin la campaña oficial de las elecciones generales de México, que se perfilan como históricas por sus dimensiones y porque posiblemente llevarán por primera vez a una mujer a la presidencia.
“Este 2 de junio una vez más vamos a hacer historia”, afirmó la candidata Claudia Sheinbaum ante una multitud, que al grito de “¡Presidenta, presidenta!” la recibió en la plaza principal de la Ciudad de México, el escenario para el cierre de la campaña oficialista del partido Morena.
“No los voy a defraudar”, dijo Sheinbaum al comprometerse al darle continuidad al proyecto político de su mentor, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cierre de campaña en México
El Zócalo capitalino se vio desbordado por decenas de miles de manifestantes quienes, entre carteles con el rostro de Sheinbaum y banderas de Morena, celebraron el fin de la campaña. Según la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la capital, a la concentración oficialista acudieron unas 550.000 personas.
“Yo estoy esperanzado. Yo tuve una mamá que me quería mucho y nunca me dejó. Ella, Sheinbaum, va a ser una madre para todos”, afirmó Luis Muñoz Hernández al hablar de las razones que lo llevaron a apoyar a la exalcaldesa.
“Confío en que va a seguir la obra de Andrés Manuel para que no haya más desigualdad y todos los programas sociales lleguen a la sierra, donde más los necesitamos”, agregó.
Candidata opositora Xóchitl Gálvez
Más temprano, la candidata opositora Xóchitl Gálvez realizó un primer mitin en el municipio de La Paz, en las afueras de la Ciudad de México.
“Me importan tus hijas, tus hijos; ya basta que tengas miedo de salir a la calle”, dijo ante miles de seguidores que la recibieron al grito de “Fuera Morena”, el partido de Sheinbaum, la favorita de la contienda.
Gálvez, empresaria e ingeniera de 61 años, optó esta vez por huir de los insultos y la polarización que han caracterizado la campaña y se comprometió “a ganar para unir este país; basta de división, basta de odio… todos somos mexicanos”.
Pero efectuó duras críticas a la violencia que vive la nación y apostó por llevar a los criminales ante la justicia, en lugar del lema del presidente de “Abrazos, no balazos”.
El opositor Jorge Álvarez Máynez, del partido minoritario Movimiento Ciudadano, también cerró su campaña en la capital mexicana con una concentración en un teatro.
En su intervención, Álvarez Máynez agradeció el apoyo de los jóvenes y reiteró sus ataques contra los partidos tradicionales.
“Aquí este país va a cambiar, va a ver al futuro. Nunca más, nunca más vamos a tener en la cárcel a un joven por fumar marihuana”, expresó el político de 38 años, que incluyó entre sus planes de gobierno la regulación del consumo del cannabis.