En esta edición de los 5IMP, enmarcada en el Día Nacional del Árbol, celebrado el domingo 26 de mayo, conmemoramos a los centinelas verdes de la ciudad; los árboles emblemáticos de Barquisimeto, que enriquecen su patrimonio natural.
En la biodiversidad de la capital larense destacan cinco especies arbóreas que se han convertido en símbolos de identidad y belleza para su gentilicio.
Centinelas verdes
En el quinto lugar, se presenta la Kigelia Africana o árbol salchicha, por su fruto alargado con forma de salchicha que puede crecer hasta 60 cm, característica que lo distingue en la ciudad. Es originario de África, pero se encuentra comúnmente en regiones tropicales y subtropicales.
La Kigelia Africana, o Kigelia Pinnata, es un árbol de gran magnitud que puede alcanzar hasta los 10 metros de altura, las flores del árbol salchicha son grandes y acampanadas, con un olor fuerte y desagradable y suelen ser de color amarillo o naranja.
Ceiba blanca
En el cuarto lugar, se presenta la Ceiba Blanca (Ceiba pentandra), un árbol imponente que puede alcanzar los 60 metros de altura. Se erige como testigo silencioso de la historia de Barquisimeto. Su espinoso tronco robusto y sus amplias ramas frondosas ofrecen cobijo, simbolizando la fuerza, la sabiduría. Es considerada un árbol sagrado por muchas culturas, y su presencia en la ciudad representa un símbolo de sabiduría, longevidad y conexión con la naturaleza.
En el tercer lugar, se presenta el Samán (Samanea saman), un coloso árbol de follaje frondoso y copa extendida que lo convierten en un oasis de paz en medio de la vida urbana de la ciudad, proporcionando sombra y frescura en calles, avenidas y parques.
El Samán es un árbol valioso para el ecosistema urbano, ya que purifica el aire y ayuda a regular la temperatura, además de adornar con su esplendor. Puede alcanzar hasta 40 metros de altura.
Apamate
En el segundo lugar, tenemos el Apamate, otro árbol emblemático de Barquisimeto que cautiva con su floración espectacular desde febrero a abril y de octubre a diciembre, es conocido por sus delicadas flores rosadas o blancas y ocupa un lugar especial en el corazón de los barquisimetanos.
La presencia habitual del Apamate o Roble Morado en calles y plazas lo convierte en un referente de la vida urbana, aportando armonía y frescura al paisaje.
Araguaney
En el primer lugar tenemos el Araguaney (Tabebuia chrysantha), declarado árbol nacional de Venezuela el 29 de mayo, es un ícono indiscutible de Barquisimeto e ilumina las calles de la ciudad con su follaje dorado entre los meses desde febrero a mayo, con el inicio del período de lluvias, cuando está desprovisto de hojas.
El Araguaney no solo es apreciado por su belleza, sino también por su valor ecológico, ya que atrae polinizadores y contribuye a la conservación de la biodiversidad.
Árboles emblemáticos de Barquisimeto
Más allá de su belleza estética, estos cinco árboles emblemáticos de Barquisimeto cumplen un rol fundamental en el equilibrio ambiental de la ciudad. Ayudan a regular el clima, purificar el aire, conservar el suelo y proporcionar hábitat para la fauna silvestre.
Conscientes de su valor incalculable, la Alcaldía del municipio Iribarren, a través de la Dirección de Ambiente, ha establecido la Gaceta Municipal para la Plantación y Protección de Árboles, con el objetivo de garantizar la conservación y el manejo sostenible de estos recursos naturales. En esta normativa se establece que la planificación, el establecimiento, el manejo, el desarrollo, el control y la protección de los espacios públicos arbolados son de responsabilidad integral del municipio.