Una inteligente y multidisciplinaria periodista caraqueña, Sara Lizárraga, abrió un chat donde informa sobre los desastres naturales a nivel planetario y con base a esta información se puede dibujar un mapa de la vulnerabilidad de los ecosistemas a nivel mundial a causa de la intervención humana.
Por ello relacionar Ecología y Sociedad en estos momentos refiere inevitablemente una confrontación dado que las amenazas planetarias contra el medio ambiente nacen del tipo de Sociedad en la cual vivimos, donde existe un notorio divorcio entre las metas individuales y grupales que tenemos como humanos y las necesidades de equilibrio biológico que requiere la nave celeste que nos transporta.
Aunque parezca paradójico los primeros que avizoran este peligro fueron los anarquistas, a quienes la Historia ha satanizado como destructivos, cuando formularon la tesis de la Ecología Social.: ”La ecología social» es una disciplina filosófica fundada por Murray Bookchin. Se define como una escuela del ecologismo y del anarquismo que busca un manejo humanista del medio ambiente, y afirma que existe una relación holística entre los seres naturales, incluidos los seres humanos, que lleva a afirmar a los ecólogos sociales que el orden natural no necesita autoridades ni mando centralizado, sino que es descentralizado y en red. Eso significa que la naturaleza se autorregula y de igual forma pueden organizarse los humanos, que producen los problemas ambientales sólo cuando introducen procesos autoritarios en sus sociedades.
Así tenemos que en la génesis de los estudios ecológicos estaba presente la motivación de fusionar esta ciencia con propósitos sociales de trascendencia espiritual, algo que es fundamental en la actualidad para ubicar los problemas del clima y del medio ambiente en la órbita de lo inmediato cotidiano, junto a los valores que giran en torno a la Fe.
La Ecología se define como la biología de los Ecosistemas, esta definición la hace una ciencia claramente separable de las demás y por ello potencialmente sujeta de ser imbricada con ese Todo donde se fusionan ciencia y filosofía.
Incluso quien propuso el nombre de Ecosistema para demarcar los espacios físicos a estudiar, Tansley, lo definió como un sistema completo, compuesto por organismos y el complejo total de factores físicos que forman el ambiente que los rodea y añadía:” Estos ecosistemas constituyen las unidades básicas de la Naturaleza y pueden considerarse una de las categorías de sistemas físicos del Universo que van desde el mismo Universo hasta el átomo”.
Esta definición de Ecosistema válida pues todo el conocimiento críptico que tiene como misión entender las formas mediante las cuales el ser humano logra su acoplamiento dentro de la red inconmensurable de intercambios de energía de la cual somos parte. Explica también cómo desde nuestra pequeñez recibimos influencia de astros y galaxias que interactúan con la Tierra a velocidades de vértigo. En fin, reflexionando sobre este tema, podemos arribar a lo que masones y rosacruces saben: Como es arriba es abajo, aunque para nosotros, los no iniciados, sea algo infuso e incomprensible.
Es la Ecología el equilibrio de la vida y lo que llamamos vida está contenida en una franja de apenas cinco kilómetros y medio de altitud, una distancia que muchos caminan todas las tardes para darle tono a su sistema cardiovascular. Sin embargo hablamos de la vida como algo que no tiene límites de espacio…..y puede ser que no los tenga si la entendemos y asumimos como una esencia ubicua heterodirigida por energías cuánticas: El Brahman, el Éter, el Tao, el Cosmos…el Uno y el Todo.
Jorge Euclides Ramírez