En un esfuerzo por reforzar la seguridad fronteriza y combatir la migración irregular, el gobierno de Estados Unidos ha donado a El Salvador un conjunto de aeronaves no tripuladas, conocidas como drones, valoradas en aproximadamente 4,5 millones de dólares. La ceremonia oficial de entrega se llevó a cabo este viernes, marcando un hito en la cooperación bilateral para abordar los desafíos de seguridad y migración.
La Embajada de Estados Unidos informó que estos sistemas de vigilancia avanzados serán desplegados a lo largo de las zonas fronterizas para detectar y prevenir cruces ilegales de contrabandistas y migrantes. La donación incluye dos drones tipo Puma y sus respectivas aeronaves de respaldo, así como cuatro drones Raven y sus aeronaves de respaldo.
El embajador estadounidense, William H. Duncan, destacó la importancia de la colaboración internacional frente a las actividades ilícitas que trascienden fronteras nacionales. Por su parte, el ministro de Defensa de El Salvador, René Merino Monroy, señaló que la incorporación de estos drones mejorará significativamente la capacidad de respuesta de las Fuerzas Armadas en los pasos fronterizos no habilitados.
Este apoyo llega en un momento crítico, ya que una encuesta reciente del Instituto Universitario de Opinión Pública reveló que un 21,4% de los salvadoreños desean migrar por razones económicas, y Estados Unidos ha deportado a 2.432 salvadoreños en los primeros dos meses de 2024.