El bisonte americano, es un mamífero majestuoso que alguna vez recorrió las praderas de Norteamérica en manadas de millones de ejemplares. Con su imponente presencia y su pelaje marrón rojizo, el bisonte es un símbolo icónico de la fuerza y la resistencia de la naturaleza.
Este herbívoro rumiante perteneciente a la familia de los bóvidos. Los machos adultos pueden alcanzar hasta 3 metros de largo, 2 metros de altura y pesar más de una tonelada, convirtiéndolos en uno de los mamíferos terrestres más grandes de América del Norte. Su pelaje es grueso y de color marrón rojizo, con una joroba distintiva en la espalda. Las hembras son ligeramente más pequeñas que los machos y tienen cuernos más cortos.
Habita principalmente en praderas, sabanas y bosques abiertos. Se alimenta principalmente de pastos, juncos y hierbas, aunque también puede consumir hojas, brotes y frutos. Su dieta varía según la estación del año y la disponibilidad de alimentos.
Los bisontes son animales sociales que viven en manadas que pueden llegar a tener miles de individuos. Éstas, están compuestas principalmente por hembras y sus crías, mientras que los machos adultos viven solos o en pequeños grupos durante la mayor parte del año.
Las manadas de bisontes viajan constantemente en busca de alimento y agua, y su migración juega un papel vital en el mantenimiento de los ecosistemas de las praderas.
En el siglo XIX, el bisonte americano fue cazado hasta casi su extinción debido a la demanda de su carne, piel y cuernos. Se estima que en 1880 solo quedaban alrededor de 50 bisontes salvajes en todo el mundo. Sin embargo, gracias a los esfuerzos de conservación, las poblaciones de bisontes han aumentado significativamente en las últimas décadas.