Por: Jonathan Reverón
Para su audiencia con la prensa internacional, las anfitrionas del Salone del Mobile.Milano recibieron treinta periodistas. Haciendo gala de la condición cosmopolita, hablando una lengua y todas al mismo tiempo, con un poco de palabras de aquí y de allá, Milán le da sentido a las bienvenidas. Las voceras principales para traducir los alcances de la 62 edición del encuentro mundial fueron, María Porro, presidenta del Salone del Mobile.Milano; y Marva Griffin, curadora y fundadora del Salone Satellite, quienes atendieron diversas interrogantes entorno a la industria del diseño, el enfoque sustentable y la fortaleza de un negocio que representa una roca de arena y significativa industria para el producto interno bruto italiano.
Del 16 al 22 de abril, quince geografías fundamentales del mercado contemporáneo -con China a la cabeza- asomaron aires de recuperación e inversión. “Pero antes de empezar, quiero pedir un aplauso para nuestra querida Marva Griffin por los 25 años del Satellite”. Así comenzó la participación ante el foro, la presidente del evento, María Porro, sumándose a los reconocimientos para la guayanesa cuyo laureado mérito es haber encontrado la fórmula de consolidar la tradición de toda una industria, creando un semillero que asciende a 14.000 participantes e interpreta la creación de objetos a la medida de la escala humana, ya sea para la intimidad del hogar o para los espacios exteriores, esta nueva generación de diseñadores practica un aprendizaje experto en compaginar las fuerzas ecológicas y las sostenibles para el negocio del mueble.
“Esta edición también es importante porque hemos logrado que finalmente el mundo entero volviera a Milano”, se refiere María Porro, a los números de asistencia que superan las 360.000 visitas, y que apreciaron una feria expositiva cada vez más llena de experiencias, pues además de ver, comprar y vender objetos, el Salone sigue incorporando instalaciones artísticas, charlas y cuestiones que expresan las reflexiones que preceden a la fabricación de objetos y mobiliarios: “El Salone es sobre todo una industria que trabaja todo el año para miles de exhibidores, y además de presentar novedades presentamos valores que perduran a través del tiempo. Cada novedad que aquí se presenta se convierte en un ícono del diseño que ve hacia el futuro”.
Llama la atención como la mayoría de la oferta habla sobre la sustentabilidad
-Sí. La sustentabilidad no es un ángulo o un mero punto de observación. Es algo que viene desde adentro, y debe estar inserto en cada proceso productivo. La manera en que hasta el propio evento se organiza, que las compañías construyen sus stands, el contenido que difundimos, y la forma en que permea en todas partes es sustentable. Estamos certificados por las normas ISO, y cada certificación también es prueba de que estás haciendo progresos de tu propia experiencia. Todavía hay mucho por hacer en este sentido. Este año se prohibió el uso del drywall, por ejemplo. De manera que es una filosofía que hace vida en el día a día de nuestro trabajo.
En un mundo con tantos conflictos y para un evento que interconecta tantas culturas, ¿cuál es el rol del diseño?
-Estamos en un momento difícil, pero aquí estamos hablando un mismo idioma que es el diseño, esta es la prueba de que nos podemos entender. La sostenibilidad significa respeto por el medio ambiente y por las personas, porque la calidad se pueda encontrar en toda la cadena del suministro, inclusive, buscamos calidad en la manera en que vendemos nuestros productos, de cómo se realiza la negociación, así que el Salone es un lugar para la diplomacia del diseño.
Cuál es su visión de un mercado tan competitivo y el liderazgo de países como China en este negocio
Es verdad que la demanda de calidad del mercado chino se acrecienta, el Salone ha tenido la oportunidad de demostrar su trabajo en Shanghai y de comprender su mercado. Es increíble como el productor italiano ahora es capaz de satisfacer a los clientes a través del crecimiento de sus marcas en varias ciudades chinas. Además de atender de manera especial las necesidades de China, hemos desarrollado un programa comunicacional peculiar, conscientes de la oportunidad que representa para nuestros exhibidores. Los grandes proyectos que se habían detenido por la pandemia están activándose, y entre ellos está poder gestionar con otros países esta dinámica de acompañamiento con ese mercado.
Qué esperan de esta gran convención de productores, vendedores, profesionales y próximos graduandos del diseño
Imagínate que el Salone es una feria de intercambio comercial, de martes a jueves; luego es abierta a todo el público el fin de semana, pero el viernes, le abrimos las puertas a estudiantes durante los días de negociaciones, a través de tickets especiales. Creemos que es muy importante que los estudiantes puedan conectarse con el todo, porque existe “la creatividad” pero también “la industria”, construimos para ellos un puente entre estos dos aspectos, y el Satellite fundado por Marva es un gran modelo. Esta apertura a los jóvenes crea la visión panorámica en términos de la inversión que hacen las compañías desde todos los puntos de vista: materia prima, recursos humanos, fabricación, comunicaciones, arquitectura, ingeniería. Creo que con esta oportunidad logran entender que la creatividad no es suficiente, pero sin duda es el punto de partida.
¿Cómo puede contribuir el Salone a que los países valoren sus materias primas y aumenten su cartera de clientes productores?
Venimos de hacer una pregira para promocionar el evento, que incluyó catorce ciudades: Shanghai, París, Londres, Berlín, Miami, Copenhague, Toronto, Dallas, Nueva York, Las Vegas, Chicago, Madrid, Sudáfrica, Osaka, Nueva Delhi y Seúl. Por ejemplo, cuando estuvimos en Seúl, un profesor universitario me mostró un proyecto de bastones hechos con madera sellada al fuego, impresionante. En 2022 creamos un proyecto en el Satellite llamado “Materioteca”, lo que fue muy importante porque el acceso tanto al material como a precios competitivos se hace difícil, por eso compartimos estos descubrimientos con nuestros exhibidores y con el público. Este es un objetivo interesante para las ideas del próximo año.
Por: Jonathan Reverón
@elreveron