Al árbol debemos solícito amor
jamás olvidemos que es obra de Dios.
El Árbol da sombra, como el cielo fe
con flores alfombra su sólido pie
sus ramas frondosas, aquí extenderá
y frutos y rosas a todos dará
Él es tan fecundo y rico sin igual
que, sin él, el mundo sería un erial
no tendría palacios el hombre, ni hogar
ni las aves los espacios, ni velas el mar
Ni santuario digno para la oración
ni el augusto signo de la redención
no existirían flores, ni incendio, ni unción
ni suaves olores que ofrendar a Dios.
“Al árbol debemos solícito amor…” Así comienza el himno al árbol escrito por Alfredo Pietri y composición musical de Miguel Ángel Granado, en el que se destacan las virtudes de cobijo de los árboles, como fuentes de alimentos y refugio.
Atendiendo a un recordatorio realizado por el Ingeniero Cristopher Kossowsky hacemos un llamado a reflexión a las autoridades a quienes compete parar el ecocidio que se viene cometiendo y a los ciudadanos en general, especialmente a quienes conscientes o no, están ocasionando daños irreparables al ambiente.
El “Día Mundial del Árbol” se celebra el 29 de abril. Es una fecha para concientizar a la gente sobre la necesidad de proteger las superficies arboladas. Una jornada dedicada a plantar árboles en diferentes lugares, para frenar los efectos del cambio climático y la tala indiscriminada.
Suecia fue el primer país en celebrar el Día del Árbol en el año 1840, desde entonces, los ciudadanos ya consideraban de gran importancia y relevancia el cuidado de los recursos forestales del país, así como que los niños desde temprana edad aprendieran a cuidar y conservar la naturaleza. La instauración del “Día Mundial del Árbol” surgió como iniciativa del Congreso Forestal Mundial celebrado en Roma en el año 1969. La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) aceptó dicha iniciativa en el año 1971. Existe un gran número de países que tienen su propio Día del Árbol.
Cada país realiza numerosas actividades sobre todo didácticas, para que los niños y mayores aprendan la importancia de conservar los bosques y los recursos forestales que la naturaleza nos ofrece. Entre las actividades más frecuentes que cada año suelen realizarse se encuentran:
- Plantar árboles.
- Limpieza de bosques.
- Actividades de esparcimiento en la naturaleza.
- Sensibilización sobre el cuidado y protección de los árboles.
Los bosques son de extrema importancia para la vida porque:
- Regulan el ciclo del agua. Recogen y almacenan el agua, ayudan a evitar las inundaciones.
- Protegen los suelos. Ayudan a controlar la erosión y a evitar derrumbes y deslizamientos.
- Contribuyen a regular el clima. Reducen los efectos del cambio climático producido por el hombre.
- Son la fuente de muchos recursos como madera, medicinas, alimentos, fibras y materiales de construcción. Son fuente de energía primaria en muchos países.
- Se cree que existe un sinnúmero de plantas medicinales, hasta ahora desconocidas, que están siendo exterminadas por la tala y la quema indiscriminada.
- Son territorio de vida para las comunidades que los habitan, cuyas prácticas tradicionales de manejo pueden contribuir a la conservación de estos bosques y selvas.
- Son el hábitat de miles de especies de plantas, aves, mamíferos, reptiles y anfibios. Esto cobra especial importancia al ser Venezuela un país de gran diversidad biológica, que ocupa un lugar importante en cuanto a número de especies se refiere y es el séptimo reservorio de agua dulce a nivel mundial, en una época donde se ha vaticinada que las próximas guerras podrían ser por la posesión del vital líquido.
- El 12% de los bosques del mundo están designados para la conservación de la diversidad biológica (FRA 2010).
Fuente: https://cidemos.org/
Cada último domingo de mayo se celebra en Venezuela el Día Nacional del Árbol, un recordatorio que nace de lo importante que es éste proveedor de vida.
Desde el 10 de abril de 1905, durante el mandato de Cipriano Castro, se estableció que en las escuelas del país debía festejarse el 23 mayo como el Día Nacional del Árbol, en reconocimiento a una especie que proporciona múltiples beneficios a todos los seres vivos. En 1909, la fecha fue movida para el 15 de mayo.
Luego, el 29 de mayo de 1948 se decretó que El Araguaney, un llamativo ejemplar que pierde sus hojas entre los meses de febrero y abril, para entrar en la etapa de floración con unas nítidas flores amarillas, que lo hacen inevitablemente centro de atención, es declarado Árbol Nacional de Venezuela.
También, como un homenaje al araguaney que adorna todos los paisajes de los campos de la patria, se instituye el 29 de mayo como el Día del Árbol. Sin embargo, por resolución del Ministerio de Educación en 1951, se determina que se debe festejar la Semana del Árbol a partir del Día Nacional del Árbol, que se decidió fuera el último domingo del mes de mayo.Los árboles son indispensables para que exista vida en el planeta, por su papel en la producción de oxígeno y en la reducción del dióxido de carbono en la atmósfera.
Maximiliano Pérez Apóstol