En un giro preocupante para la libertad de expresión y la actividad política en el estado Portuguesa, la coordinadora de Vente Venezuela, María Oropeza, ha denunciado una serie de detenciones que apuntan a una escalada en la persecución política.
Víctor Castillo, director de campaña en el municipio Santa Rosalía, fue presuntamente secuestrado por un grupo vinculado al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y trasladado a Araure en circunstancias aún no esclarecidas.
La situación se agrava con la confirmación de la detención de Ámbar Márquez, vicepresidenta de Organización de Primero Justicia, quien se suma a la lista de activistas opositores detenidos en menos de un día. El primero fue Óscar Castañeda, capturado tras participar en un acto político con María Corina Machado.
Estos eventos han desencadenado una denuncia formal por parte del Comité de Derechos Humanos de Vente Venezuela contra el Sebin, acusándolos de detenciones violentas y arbitrarias.
Las acciones han generado una ola de indignación y preocupación entre los ciudadanos y organizaciones defensoras de los derechos humanos, que ven en estas detenciones un claro intento de silenciar las voces disidentes y reprimir la disidencia política en Venezuela.