Durante un emotivo encuentro en Venecia, el Papa Francisco ha hecho un llamado a los jóvenes para que se alejen de sus dispositivos móviles y busquen una conexión más profunda y humana con los demás.
En un discurso que resuena con la preocupación contemporánea por la creciente dependencia de la tecnología, el pontífice ha animado a los jóvenes a “dejar el celular” y a “encontrar a la gente”, enfatizando la importancia de las experiencias compartidas y la comunión espiritual.
El papa mantuvo un encuentro con los jóvenes venecianos a las puertas de la basílica de Santa María de La Salud, adonde llegó en lancha motora tras visitar la cárcel femenina de la Giudecca en este viaje a Venecia de apenas cinco horas.
“No os aisléis, buscad a los demás”, aconsejó, sugiriendo que aunque los teléfonos son herramientas útiles para la comunicación, no deben impedir el encuentro personal y el contacto físico, como un abrazo o un apretón de manos.
Con una visión clara de un futuro donde la tecnología sirve para unir y no para dividir, el Papa ha desafiado a los jóvenes a ser “creadores de novedad” en lugar de “profesionales del teclear compulsivo”. Este mensaje llega en un momento crucial, donde la sociedad reflexiona sobre el equilibrio entre la vida digital y la interacción humana.
