Más allá de los partidos, de los candidatos y de los actores que participan en este proceso electoral, las condiciones competitivas o semi competitivas del mismo dependerá de la participación de la sociedad venezolana, según el criterio del conocido politólogo Piero Trepiccione.
Al ser entrevistado por El Impulso dijo que este proceso tiene que ser monitoreado a diario por todos los sectores de nuestra sociedad porque es un tema que atañe a todas y todos.
¿Cómo se proyectará la inclinación del voto hacia el doctor Edmundo González Urrutia, quien hasta ahora no es una persona conocida por los electores?
Todo va a depender de cómo evolucione la intención del electorado y si es plausible o no que haya un proceso de transmutación de los votos, en este caso de la ganadora de la Primaria del 22 de octubre de 2023, María Corina Machado. Hay que monitorear diariamente en qué medida se amalgama la intención de votos luego de haber tomado la decisión la Plataforma Unitaria. Hay que esperar, por lo menos diez días, para tener una información científica, válida, que indique cómo se reinstalan las tendencias electorales en el país.
¿La gente que ha estado apoyando a María Corina Machado lo haría automáticamente por González Urrutia o lo estaría pensando, o decidiendo si vota o no?
Antes de la selección del candidato por la Plataforma Unitaria y de llegar al acuerdo para apoyar a González Urruitia, hasta ese momento, había, por una parte, 53-54 por ciento de intención de votar y, por la otra, de un 20 por cientos, lo que daba unos niveles de intención de participación superiores al 70 por ciento, que era un buen síntoma. La que venía encabezando las encuestas era María Corina Machado y en segundo lugar, Nicolás Maduro Moros. Claro, hay que ver ahora, con estos nuevos reacomodos, porque, efectivamente, la Plataforma Unitaria y los factores del G-4, definitivamente, seleccionaron la candidatura de González Urrutia; pero, también hay movimientos dentro de la llamada alianza democrática. Esta semana Juan Carlos Alvarado declinó en favor de Eduardo “El Burro” Martínez. Es probable que ocurran otras declinaciones y terminen el clásico presidencial no ya con trece candidaturas, sino con menos. Habría que ver en esa decantación candidatura, las nuevas tendencias. Pero, como está el escenario es muy probable que ocurra la transferencia de votos porque ya se vio con el caso de la doctora Corina Yoris, que ocurrió un fenómenos similar. Sin embargo, para hablar con estadísticas en mano, con fuerza científica en mano, tendríamos que esperar cuan tanto se mueven las inclinaciones electorales.
¿Cómo se puede ver la decisión tomada por el gobernador del Zulia, Manuel Rosales, de retirar su candidatura cuando parecía que la mantendría por haber recibido apoyo de partidos diferentes a Un Nuevo Tiempo?
Considero que fue una decisión bien madurada y bien recibida por factores opositores. No se puede obviar que la discusión interna no ha sido fácil por parte de los factores opositores; pero, era la decisión más lógica por cuanto las circunstancias políticas obligan a tener una candidatura unitaria. Mantener dos o tres candidaturas hubiese sido muy mal visto por la sociedad venezolana. Creo que ha sido una decisión racional y ajustada a las circunstancias que vive la oposición.
Ya que hablamos de Rosales, que es el gobernador del estado con mayor población electoral, ¿qué podría pasar con Enrique Márquez, exrector del Consejo Nacional Electoral, quien se lanzó a última hora también como candidato presidencial?
Lo lógico es que Márquez termine apoyando a González Urrutia. Pero, en todo caso, si no es así y mantiene su candidatura, o decide apoyar a otro candidato distinto a González Urrutia, el peso electoral no está allí. El nombre más importante es el de Rosales por su trayectoria en el estado Zulia y también por ser el principal dirigente de Un Nuevo Tiempo, que es un partido más fuerte y tiene una gran organización en todo el territorio nacional. Eso puede constituir un mayor peso en el proceso electoral. En cambio, Enrique Márquez es un técnico electoral, una persona conocedora de la sistemática electoral en el país por sus propios méritos, pero que a nivel de peso porcentual y apoyo político es muy pequeño para tener incidencia con su candidatura o apoyar otra candidatura.
¿Cree usted que hay definiciones concretas en este proceso electoral porque antes había dudas, incertidumbre y preocupación porque no se sabía si la Plataforma Unitaria no concretaba una candidatura que pudiera no ser bloqueada por el CNE?
Un proceso electoral, sobre todo a este nivel presidencial, siempre es una buena oportunidad para la sociedad. Siento que es clave el tema de la participación política. Obviamente, sabemos que hay un situación de confrontación política elevado en el país y que el cronograma tiene ciertas limitaciones en materia de tiempo y niveles competitivos; pero, por encima de eso, creo que es una enorme posibilidad para la sociedad venezolana demostrar su civismo, su entereza democrática, su derecho de participación y ser co-protagonista de las decisiones públicas, que van a impactar el desarrollo del país por lo menos en los próximos diez años.
¿Qué nos puede decir en relación con el Registro Electoral, el cual no se incrementó para esta campaña, porque apenas fueron inscritas unas 400 mil personas dentro del país y, según algunos dirigentes políticos, quedaron por fuera más de tres millones de personas porque el CNE no desarrolló las jornadas necesarias?
Siento que el cronograma es muy restrictivo, muy corto y pienso que las autoridades electorales deben tener algún tipo de reconsideración porque, efectivamente, a lo largo y ancho del país se pudieron ver enormes colas en los puntos dispuestos por el CNE para la inscripción electoral y actualización de datos de los electores. Así como se ha prorrogado, por ejemplo, el tema de la inscripción de las candidaturas y la sustitución de las mismas, los rectores del organismo electoral debieran considerar las muchas peticiones hechas por estudiantes, organizaciones juveniles y movimientos que han venido públicamente exigiendo las inscripciones. Sería lo más sano y conveniente para este proceso.
Ante la reanudación de sanciones, ¿estas elecciones podrían ser más transparentes, más limpias, como se ha venido pidiendo?
Este es un tema de todas y todos. El destino del país no se le puede dejar exclusivamente al liderazgo político. Cuando hablo del liderazgo político me refiero al liderazgo de cualquier signo ideológico, ya sea de oposición o de gobierno. Creo que la sociedad entera tiene que involucrarse activamente en este proceso electoral y estar muy pendiente de lo que vaya ocurriendo día a día, porque la democracia es un concepto vivo. La democracia está viva en tanto y en cuanto la sociedad se interese por ella, por los procesos electorales y por todo lo que signifiquen las funciones públicas. Creo que en este proceso tiene que ser monitoreado diariamente por todos los sectores de la sociedad, más allá de los partidos político, de los candidatos y de los actores involucrados en la campaña electoral, para que la participación garantice que la voluntad general ejerza la soberanía en el país y no los intereses de grupos pequeños que pretenden mantenerse en el poder a toda costa o conquistar el poder a toda costa. De la participación va a depender las condiciones competitivas o semi competitivas de este proceso.