El mercado automotriz venezolano continúa dominado por vehículos importados, con una alarmante cifra: 90% de las unidades nuevas provienen del extranjero. Esta situación pone en desventaja la producción nacional, que apenas alcanza un magro 10%, según lo informado por el presidente de la Cámara Nacional de Comercio de Autopartes (Canidra), Diógenes Madriz.
Las cifras son desalentadoras, en los últimos meses solo se han ensamblado entre 20 y 30 vehículos en el país, una cantidad ínfima comparada con las importaciones.
Diversos factores inciden en este panorama adverso
Altos impuestos: La carga fiscal que recae sobre la producción nacional encarece significativamente los precios, haciéndolos menos competitivos frente a los vehículos importados.
Falta de financiamiento: El acceso a créditos para la adquisición de vehículos nuevos es limitado, lo que dificulta la renovación del parque automotor nacional, que actualmente tiene una antigüedad promedio de 22 años. Según la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (Favenpa), el 73% de los vehículos en Venezuela tiene más de 15 años.
Falsificación y contrabando: La presencia de productos falsificados y de contrabando en el mercado afecta negativamente a la industria nacional, desalentando la inversión y la producción local.
A pesar de este panorama desafiante, Canidra ha expresado su optimismo ante la implementación de nuevos planes de financiamiento para la adquisición de vehículos por parte de la banca. Sin embargo, consideran que estos planes aún son tímidos y deberían ampliarse en cuanto a su alcance, tasas de interés y plazos para que realmente impulsen la recuperación del sector.
