El pasado viernes 19 de abril, el Colegio Inmaculada Concepción celebró con gran alegría su 120 aniversario de fundación. Un evento emotivo que reunió a exalumnas, docentes, religiosas y miembros de la comunidad educativa para conmemorar un legado de formación integral y valores cristianos.
La celebración inició con una solemne Eucaristía oficiada por el Padre Efraín Pastrán, en la que se agradeció a Dios por los 120 años de historia del colegio y se pidió por el bienestar de toda la comunidad tarbesiana. Posteriormente, se llevó a cabo un compartir fraterno, donde las exalumnas pudieron reencontrarse con sus compañeras, recordar anécdotas de sus años de estudio y expresar su profundo cariño por la institución que las formó.
El legado tarbesiano: fe, servicio y compromiso
La Hermana Aida Mercedes, subdirectora del colegio, expresó su profunda emoción por la masiva asistencia de exalumnas a la celebración. «Verlas aquí reunidas, después de tantos años, es un regalo maravilloso», comentó. La religiosa destacó la importancia de mantener vivo el legado tarbesiano, basado en los valores de fe, servicio y compromiso con el prójimo.
En este sentido, la profesora Rosa Ariza, conocida cariñosamente por sus estudiantes como «Pilar», hizo un llamado a los alumnos y exalumnos a mantener viva la espiritualidad tarbesiana y a poner sus talentos al servicio de los demás. «El colegio nos enseñó a ser mujeres de fe, comprometidas con construir un mundo mejor», afirmó.
Exalumnas: orgullo y agradecimiento
Las exalumnas presentes en la celebración manifestaron su profundo agradecimiento al Colegio Inmaculada Concepción por la formación recibida. Gloria Álvarez, exalumna y directora de la Fundación Na’Waraos, expresó: «El colegio nos inculcó valores como la solidaridad, el respeto y la responsabilidad, que han sido fundamentales en nuestro desarrollo personal y profesional».
Álvarez también destacó el papel fundamental que han jugado las Hermanas de San José de Tarbes en la vida de las exalumnas. «Ellas fueron nuestras guías, mentoras y segundas madres», afirmó.
El 120 aniversario del Colegio Inmaculada Concepción fue una oportunidad para celebrar la historia, recordar los valores y fortalecer el sentido de comunidad entre las tarbesianas. La institución se proyecta hacia el futuro con el compromiso de seguir formando mujeres integrales, comprometidas con la fe y el servicio a los demás, llevando en alto el legado tarbesiano por muchos años más.