El presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), monseñor Jesús González de Zárate, hizo un llamado urgente al gobierno para que abra las puertas al diálogo y la búsqueda de soluciones conjuntas a la crisis política que atraviesa el país.
«Le hemos hecho saber al gobierno que tiene una responsabilidad muy grande en lo que pase en Venezuela», afirmó González de Zárate. «Tiene la responsabilidad de abrir los canales para que la respuesta a las situaciones que vivimos sea posible».
El prelado insistió en la necesidad de un diálogo genuino y respetuoso, donde se reconozca la pluralidad de pensamiento y se trabaje en conjunto por el bien común. «No podemos seguir en esta diatriba política que solo lleva al desacrédito y la polarización», advirtió.
«Nos preocupa a todos los venezolanos la indefinición del proceso político», señaló González de Zárate. «Preocupan los factores que han impedido que la oposición pueda canalizar su voluntad política de participación».
Valores para superar la crisis en Venezuela
El presidente de la CEV enfatizó que la crisis actual no se puede resolver solo con la elección de un candidato. «El verdadero desafío es encontrar el mejor bien para el país», dijo. «Esto implica un esfuerzo conjunto por parte de todos los sectores para buscar soluciones».
González de Zárate instó a las autoridades a actuar con justicia, equidad y responsabilidad. «Es necesario tender puentes, abrir puertas, derribar muros y generar soluciones en función del bien común», afirmó.
La migración, un factor clave
El prelado también destacó el impacto de la migración en la crisis venezolana. «Venezuela no puede pensar que va a solucionar sus asuntos ella sola», dijo. «Es necesario contar con el apoyo de la comunidad internacional para atender esta grave problemática».
Monseñor González de Zárate concluyó su mensaje con un llamado a la esperanza para el futuro del país. «Confiemos en que Dios nos dará la fuerza necesaria para superar este momento difícil», dijo. «Tenemos que trabajar unidos por una Venezuela más justa, próspera y fraterna».