La Fórmula 1 regresa a China este fin de semana para disputar el Gran Premio de Shanghái, una carrera que no se celebraba desde hace cinco años debido a la pandemia de coronavirus, por lo que en este nuevo escenario, Red Bull y Max Verstappen parten como favoritos, pero Ferrari y Carlos Sainz llegan con la moral alta tras un gran inicio de temporada.
Sainz, quien ya ha logrado bajar a Verstappen del primer puesto del podio en Australia este año, se encuentra en un gran momento de forma y busca confirmarse como una verdadera alternativa a los «energéticos». El español ha demostrado tener un ritmo de carrera muy competitivo y se siente cómodo al volante del Ferrari F1-75.
En esta ocasión, el Gran Premio de China tendrá un nuevo formato con la introducción de la «Sprint Race», una carrera corta que se disputará el sábado y que otorgará puntos para la clasificación final. Este nuevo formato podría beneficiar a Ferrari, ya que son un equipo más rápido en clasificación que Red Bull.
Alonso con opciones en un circuito que conoce bien
Fernando Alonso, que ha ganado en Shanghái en dos ocasiones (2005 y 2013), podría ser un rival sorpresa en esta carrera. El asturiano tiene mucha experiencia en este circuito y podría aprovecharse del nuevo formato para conseguir un buen resultado.
El Gran Premio de China promete ser un fin de semana lleno de emoción y sorpresas. La lucha por la victoria estará muy reñida entre Red Bull, Ferrari y Mercedes, y no se puede descartar que algún piloto sorpresa pueda dar la campanada.