Actualmente existe una amplia cantidad de factores que afectan de manera directa el desempeño de la profesión docente en el país. El carente incentivo económico, las limitadas oportunidades en el campo laboral y factores básicos como no brindar las condiciones dignas para realizar el ejercicio docente, son solo algunos de los elementos que han sembrado un desinterés dentro de la población estudiantil.
Zuly Mora, coordinadora del Observatorio de Educación de FundaRedes, puntualizó que se formó un gran desaliento en la mayoría de los jóvenes que consideran ingresar a la profesión docente, debido a los bajos sueldos, la insuficiente seguridad social y la inestable infraestructura educativa con la que cuentan.
“Esto es algo que en pocos años impactará negativamente en la calidad educativa de los venezolanos y requiere urgente atención”, destaca.
Ser docente en Venezuela
El Impulso, junto a otros medios nacionales, entrevistaron docentes para conocer sus realidades y expectativas sobre los posibles anuncios del próximo 1° de Mayo (Día del Trabajador) y la causa de su constante apuesta por la educación en Venezuela.
Entre las declaraciones de los educadores se encontró que la única razón por la que continúan en la lucha por la formación académica en el país es la vocación, ya que viven del rebusque diario.
“Me vi en la necesidad de tener dos trabajos para poder sobrevivir, ya que como profesora recibo solo 190 bolívares quincenales y necesitaba un ingreso adicional”, cuenta docente.
Repostería, costura, venta de productos alimenticios y otros oficios son las actividades paralelas a las que han tenido que recurrir muchos docentes venezolanos para poder completar su sueldo y así subsistir.