Desde hace más de 34 años, he intentado despertar conciencia sobre el desastre ecológico que viene ocurriendo en el estado Lara y más allá de nuestras fronteras, en las tres principales cordilleras del país: los Andes, la Cordillera del Centro y la de Oriente.
Considerando que es deber ineludible de la “Red de Instituciones Larenses”, el “ocuparnos” por la preservación de la vida en esta “Tierra de Gracia”, a continuación “transcribo textualmente” un comunicado, del cual, por lo grave de la denuncia expresada en él, en muy pocas palabras no estoy de acuerdo. Presumiendo ciertos los hechos, todos debemos instar a las autoridades pertinentes a que se realice la investigación correspondiente, de ser el caso identificar a los culpables y aplicarles todo el peso de la ley. Cito:
En la Fiscalía Superior del Estado Lara fue presentada denuncia contra la deforestación del bosque xerófilo en el semiárido larense.
Según estudio publicado por la FAO y el MINEC (2023), la superficie del bosque xerófilo correspondiente al semiárido larense se ha reducido en 4.042,04 Km2, lo cual representa el 20% de la superficie territorial del estado Lara, al pasar de 10.710,70 Km2 en el año 1989 a 6.668,83 Km2 en el 2019. Esta reducción equivale al 38% de la superficie del referido espacio bionatural.
Entre los factores desencadenantes de este desastre ambiental se destaca la deforestación promovida por empresas extractivistas, para la producción de carbón vegetal con orientación principal hacia la exportación. Dichas empresas financian moto-sierras a pobladores locales que talan y queman madera de vera, curarí y cují en hornos artesanales y luego se la venden a 200 $ la tonelada, en el caso de la vera. Al llegar al “puerto seco” de la Empresa de Comercio Exterior de la Gobernación del estado Lara (EMCOEX) el valor de dicho rubro se multiplica en un 650% para totalizar 1.300 $ la tonelada.
Es de hacer notar que para producir 1 tonelada de carbón se requiere talar 5 toneladas de madera que al ser quemada arroja a la atmósfera 4 toneladas de dióxido de carbono.
Esta acción destructora del ecosistema se está ejecutando en las parroquias Castañeda (Atarigua), Espinoza de los Monteros (Arenales), Antonio Díaz (Curarigua), Chiquinquirá (Aregue), Camacaro (Río Tocuyo), Reyes Vargas (Parapara) del municipio Torres; Siquisique del municipio Urdaneta; y Aguedo Felipe Alvarado (Bobare) del municipio Iribarren.
Cabe destacar, tal como reportan pobladores locales del semiárido, las empresas carboneras también han suministrado armas a sus suplidores de carbón, para amenazar a quienes se opongan a su depredación ambiental y cuentan con escolta de personal militar y policial para los camiones que transportan el referido producto hacia sus depósitos. El personal de guardería ambiental, tanto civil como militar, que intenta detener este delito ecológico también ha sido amenazado por agentes de esta mafia del “extractivismo ilícito-criminal”.
La deforestación del bosque xerófilo produce un aumento en la temperatura del suelo, la cual se eleva de 45° a 65° y así mismo provoca la evaporación de los acuíferos y la consecuente salinización de los suelos. Además de destruir distintas especies arbóreas, la deforestación también deja sin hogar ni alimento a múltiples especies de la fauna silvestre.
La gran mayoría de las empresas, con permisos de “aprovechamiento forestal” de supuestas “plantaciones” y permisos para depósito, obtienen el carbón vegetal que empaquetan, del arrase del bosque natural que estas mismas fomentan. Esto es particularmente condenable por ocurrir en un ambiente semiárido caracterizado por altas temperaturas, escasas lluvias, elevada evapotranspiración y pronunciado déficit hídrico.
Por todo esto, un nutrido grupo de organizaciones ambientalistas, productoras de cocuy, culturales, vecinales, defensoras de los derechos humanos y colectivos de la comunicación popular alternativa, como expresión de diversos movimientos sociales del estado Lara, acudimos hoy jueves 21-3-24, Día Internacional de los Bosques, a la Fiscalía Superior a presentar una denuncia contra estos delitos ecológicos y pedir al Ministerio Público que solicite al Tribunal correspondiente, conforme al art. 8 de la Ley Penal del Ambiente, dicte, de manera preventiva y hasta tanto dure la investigación, medidas cautelares como la suspensión de todos los permisos, vigentes o por renovar, para aprovechamiento forestal y depósito de carbón otorgados por el MINEC, como medida de protección al bosque xerófilo del semiárido larense y a su Área Bajo Régimen de Administración Especial, expresada en el Parque Nacional “Cerro Saroche”, única área del semiárido protegida en el espacio continental a nivel nacional y de alto valor biológico, geológico, paisajístico y cultural.
Un saludo fraterno para el movimiento ambientalista «Guardianes de la Montaña» que están en una ardua lucha contra la ocupación y deforestación del Parque Nacional «Yacambú», por su mensaje de solidaridad con la acción que realizamos hoy.
Un agradecimiento efusivo para todas las comunicadoras y comunicadores de los medios convencionales y alternativos que nos acompañaron para registrar y difundir esta actividad de lucha ecologista.
¡¡¡NO A LA DEFORESTACIÓN DESERTIFICADORA DEL BOSQUE SECO EN EL SEMIÁRIDO LARENSE PROMOVIDA POR EMPRE$A$ CAPITALI$TA$ EXTRACTIVI$TA$-EXTERMI$TA$-TERRORI$TA$!!!
¡¡¡CAMBIEMOS EL SISTEMA, PARA PODER CAMBIAR EL CLIMA!!!
Movimiento Ambientalista del estado Lara
Maximiliano Pérez Apóstol